Lloyd Blankfein, pdte. de Goldman Sachs |
“Goldman
Sachs – OTAN Corp.”
Por Manlio
Dinucci, en Red
Voltaire
Agosto 21, 2015
“Goldman
Sachs, el banco de negocios más poderoso del mundo, acaba de contratar al ex
secretario general de la coalición militar más poderosa de la historia: la
OTAN. Aunque algunos sólo querrán ver en ello una especie de ‘jubilación dorada’,
los hechos nos muestran que no es la primera vez que algo así se produce:
Goldman Sachs y la OTAN ya mantuvieron una ‘fructífera’ colaboración durante la
guerra contra Libia”
Después de haber
sido secretario general de la OTAN (bajo las órdenes de
Estados Unidos), desde 2009 hasta 2014, Anders Fogh Rasmussen acaba de ser
contratado como consultante internacional por Goldman Sachs, el banco
de negocios más poderoso de Estados Unidos.
Es
prestigioso el currículo de Rasmussen. Como primer ministro de Dinamarca
(de 2001 a 2009), se dedicó a «la ampliación de la Unión
Europea y de la OTAN contribuyendo a la paz y la prosperidad en Europa».
Como secretario general de la OTAN, representó a la alianza atlántica en
su «pico operativo con 6 operaciones en 3 continentes», entre
ellas las guerras contra Afganistán y Libia. Además, «en respuesta
a la agresión rusa contra Ucrania, reforzó la defensa colectiva a un nivel
sin precedentes desde el fin de la guerra fría».
También
apoyó la «Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión
(TTIP)» (también conocido como Área de Libre Comercio Transatlántico o
TAFTA, según sus siglas en inglés. N de T) entre Estados Unidos y la Unión
Europea, base económica de una «comunidad transatlántica integrada».
Rasmussen
presenta por lo tanto aptitudes inestimables para Goldman Sachs, cuya estrategia
es simultáneamente financiera, política y militar. Después de años de trabajo
en Goldman Sachs, los dirigentes y consultantes de este enorme banco
estadounidense han ido a ocupar puestos claves en el gobierno de
Estados Unidos y en los de otros países. Entre ellos se encuentran
Mario Draghi –quien fue gobernador del Banco de Italia y ahora es presidente
del Banco Central Europeo (BCE)– y Mario Monti –designado en 2011 como
jefe del gobierno italiano por el presidente Napolitano.
Así
que nada tiene de sorprendente que Goldman Sachs se suba las mangas para
participar en las guerras de la OTAN. Por ejemplo, en la guerra contra
Libia, donde primeramente se apropió –provocando pérdidas ascendentes al
98%– de fondos públicos por un monto de 1 300 millones de dólares, fondos
que el gobierno libio le había confiado en 2008. En 2011,
Goldman Sachs participó también en el saqueo de los fondos soberanos
libios (estimados en unos 150 000 millones de dólares) que
Estados Unidos y la Unión Europea «congelaron» en el momento de la
guerra.
Actualmente, para administrar a través del control del Central
Bank of Libya los fondos provenientes de las nuevas exportaciones de petróleo,
Goldman Sachs se dispone a desembarcar en Libia en el marco de
la operación que Estados Unidos y la OTAN ya tienen proyectada, bajo la
bandera de la Unión Europea y la «conducción italiana».
Basándose
en una lúcida «teoría del caos», se explota la situación de
caos provocada por las guerras contra Libia y Siria, instrumentalizando
y canalizando hacia Italia y Grecia –dos de los países más débiles de la
Unión Europea– el trágico éxodo de migrantes que huyen de esas
guerras. Este éxodo sirve como arma de guerra sicológica
e instrumento de presión económica para demostrar la necesidad de realizar
una «operación humanitaria de paz» cuyo verdadero objetivo es ocupar
militarmente las zonas estratégica y económicamente más importantes
de Libia. Al igual que la OTAN, Goldman Sachs contribuye
activamente a la estrategia de Washington, que quiere disponer de una Europa
sometida a Estados Unidos.
Después
de haber contribuido, mediante la estafa de los préstamos subprimes, a
desatar la crisis financiera, que posteriormente se extendió a Europa
desde Estados Unidos, Goldman Sachs especuló sobre la crisis europea
aconsejando «a los inversionistas sacar provecho de la crisis
financiera en Europa»[1].
Según
investigaciones debidamente documentadas en 2010-2012 por medios como Der Spiegel,
el New York Times, la BBC y Bloomberg News, Goldman Sachs
también “disfrazó”, mediante complejas operaciones financieras –como «préstamos
camuflados» bajo condiciones draconianas y venta de «títulos tóxicos
estadounidenses»– el verdadero monto de la deuda griega. En este
caso, Goldman Sachs maniobró con más habilidad que Alemania, el Banco
Central Europeo y el FMI, que no han sabido esconder el yugo que pusieron
al cuello de Grecia.
Al
reclutar a Rasmussen, con la red internacional de relaciones políticas y
militares que este personaje ha tejido durante sus 5 años como secretario
general de la OTAN, Goldman Sachs refuerza sus posibilidades de influencia
y de penetración.
Fuente:
Il Manifesto (Italia)
Equipo Internacional –CAD CHILE
Agosto 22 de 2015
No hay comentarios :
Publicar un comentario