¡PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNÍOS!
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“A 150
años de la primera edición de El Capital”
Por Eduardo Lucita, integrante del Colectivo de Economistas de
Izquierda (EDI)
Una obra
que trascendió a su época
Este año se cumplen
150 años de la primera edición del Libro 1 de El Capital, de Karl Marx. Un
texto para leer y estudiar, de lectura compleja pero imprescindible para tener
una visión diferente de la economía (política) y del modo de producción
capitalista. Un siglo y medio después mantiene su vigencia y actualidad
La teoría económica de Marx
-filósofo e historiador primero, economista después- fue tomando forma y se
completó a través de 40 años -1843/1883- pero fue en septiembre de 1867, cuando
entregó los originales a su editor del Libro 1 de “El Capital. Crítica de la
economía política”, algo que le había adelantado en agosto a su amigo y
compinche de aventuras e investigaciones, Friedrich Engels. Culminaba así una
década de trabajo intenso -acosado por la pobreza, las enfermedades y la
tragedia familiar y en medio de fuertes debates políticos- que alumbraría una
obra monumental.
Ese primer volumen es el
único corregido y editado por este autor, mientras que el segundo y el tercero
fueron revisados y reorganizados por Engels en 1894 y 1895 respectivamente, y
el cuarto, Teorías de la Plusvalía, por Karl Kautsky entre 1905/1910. La
edición de este último ha sido muy cuestionada y acusada de tergiversar los escritos
originales.
¿Ahora, cuál es la significación
del Libro 1?CADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCADCAD
“La vida
truncada de Georges Politzer”
Por Iñaki Urdanibia
El día 23 de mayo de 1942 – hace setenta y cinco
años- era fusilado el filósofo, psicólogo y resistente
« La vergüenza de los años malos se ha transfigurado para nosotros por
el ejemplo imperecedero de quienes sacrificaron por la libertad su futuro y su
juventud » (Vladimir Jankélévitch)
« Oigo todavía su risa de hombre joven, ronca, forzada, sombría: un reír
de rebelde » (Henri Lefebvre )
« George Politzer sería el Feuerbach de los tiempos modernos » (Louis Althusser)
Cualquiera que haya militado o andado cerca de alguna organización
marxista (leninista) habrá topado, como texto de formación (completado
posteriormente por alguna vulgata de Stalin o las inevitables lecciones de
Marta Harnecker), con algunos textos del filósofo, psicólogo y luchador de
origen húngaro, en los que daba cuenta de una visión superficial y tosca de la
filosofía; al menos tal era un material imprescindible hace unos cuantos años.
En su fijo empeño por luchar contra las ideas burguesas y reivindicar las
proletarias, convirtió la historia de la filosofía en un campo de batalla entre
el idealismo y el materialismo, representando las primeras el idealismo y las
segundas el materialismo, que respondía a los intereses proletarios y , por
extensión, al de la humanidad emancipada; en este tenaz empeño las
simplificaciones eran del sal gruesa, más simplificadas y esquematizadas
todavía por su, encomiable, pretensión de hacer asequible la filosofía a la
gente sin estudios, y muy en especial a los proletarios.
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Bernstein (izq.) y Kautsky |
MARXISMO Y DEBATE REVISIONISTA
“Cuando Bernstein revisó la "ortodoxia" marxista”
Por Marc Mulholland
–SinPermiso,
7/10/16
Entre 1896 y 1900 el Partido Socialdemócrata Alemán
(SPD) - una organización de masas de la clase trabajadora, comprometida con el
socialismo - fue sacudido por un debate sobre el "revisionismo". Esta
fue la primera brecha intelectual importante dentro de las fuerzas del marxismo
desde que desarrolló un apoyo de masas en la década de 1880.
El debate revisionista comienza cuando Eduard
Bernstein (en la foto con K. Kautsky), uno de los principales teóricos del
partido, escribió un artículo sobre el colonialismo en 1896. En él, Bernstein
argumentó que, dado que el SPD representaba ya en 1896 a una cuarta parte de
los votantes del Reich alemán (estado), "tenemos un cierta responsabilidad
de la política de ese Reich" (1). Los trabajadores, escribió, tienen una
nación a la que deben ser leales. Cuando la causa es justa, como el apoyo a los
armenios contra la represión turca, los socialistas deben apoyar al gobierno.
El excéntrico socialista británico Ernest Belfort
Bax respondió duramente. Había conocido a Bernstein en Inglaterra y estaba
convencido de que Bernstein había "inconscientemente dejado de ser un
socialdemócrata " (2). Siempre un poco romántico cuando se trataba de
las sociedades no-europeas, Bax insistió en que el deber de los socialistas era
" luchar con uñas y dientes contra todo avance de la civilización en los
países bárbaros y salvajes... 'Mejor la esclavitud que el capitalismo; mejor el
tratante de esclavos árabe que la empresa de tráfico de esclavos': esas deben
ser nuestra respuesta a estas preguntas" (3).
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Primera Edición: En Monthly Review,
Nueva York, mayo de 1949.
Digitalización y Fuente: Unión de Juventudes Socialistas de Puerto Rico.
Esta Edición: Marxists Internet Archive, 2000
Digitalización y Fuente: Unión de Juventudes Socialistas de Puerto Rico.
Esta Edición: Marxists Internet Archive, 2000
¿Debe quién no es un experto en cuestiones económicas y sociales opinar
sobre el socialismo? Por una serie de razones creo que sí.
Permítasenos primero considerar la cuestión desde el punto de vista del
conocimiento científico. Puede parecer que no hay diferencias metodológicas
esenciales entre la astronomía y la economía: los científicos en ambos campos
procuran descubrir leyes de aceptabilidad general para un grupo circunscrito de
fenómenos para hacer la interconexión de estos fenómenos tan claramente
comprensible como sea posible. Pero en realidad estas diferencias metodológicas
existen. El descubrimiento de leyes generales en el campo de la economía es
difícil por que la observación de fenómenos económicos es afectada a menudo por
muchos factores que son difícilmente evaluables por separado. Además, la
experiencia que se ha acumulado desde el principio del llamado período
civilizado de la historia humana --como es bien sabido-- ha sido influida y
limitada en gran parte por causas que no son de ninguna manera exclusivamente
económicas en su origen. Por ejemplo, la mayoría de los grandes estados de la
historia debieron su existencia a la conquista. Los pueblos conquistadores se
establecieron, legal y económicamente, como la clase privilegiada del país
conquistado. Se aseguraron para sí mismos el monopolio de la propiedad de la
tierra y designaron un sacerdocio de entre sus propias filas. Los sacerdotes,
con el control de la educación, hicieron de la división de la sociedad en
clases una institución permanente y crearon un sistema de valores por el cual
la gente estaba a partir de entonces, en gran medida de forma inconsciente,
dirigida en su comportamiento social.
Pero la tradición histórica es,
como se dice, de ayer; en ninguna parte hemos superado realmente lo que
Thorstein Veblen llamó "la fase depredadora" del desarrollo humano.
Los hechos económicos observables pertenecen a esa fase e incluso las leyes que
podemos derivar de ellos no son aplicables a otras fases. Puesto que el verdadero propósito del socialismo es precisamente…
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“Falleció Vânia
Bambirra, una de las más importantes teóricas marxistas de la dependencia”:
Adrián Sotelo V.
La semana pasada falleció
la gran intelectual marxista brasileña, una de las creadoras de la teoría de la
dependencia, en Río de Janeiro
Graduada por la
Universidade Federal de Minas Gerais (UFMG), Maestra por la Universidade de
Brasília (UnB) y doctora en Economía por la Universidad Nacional Autónoma de
México (UNAM), es más conocida en la América Latina, de lengua castellana, que
en su proprio Brasil, donde fue exiliada por la dictadura militar y apenas
tiene tres libros publicados.
Al lado de intelectuales como
Ruy Mauro Marini, André Gunder Frank y dos Santos, formuló la Teoría Marxista
de la Dependencia, una interpretación crítica, marxista, no dogmática, de los
procesos de reproducción del subdesarrollo en la periferia del capitalismo.
En 1961, se incorporó con
un grupo de intelectuales como voluntaria para defender la Revolución Cubana.
Participó de la Organización Revolucionaria Marxista: Política Operária
(ORM-POLOP por sus siglas en portugués), que luchó contra el régimen militar
instaurado en 1964.
Exilada en Chile, integró
el Centro de Estudios Socio-Económicos (CESO) con un grupo de marxistas que
desarrollaron una nueva lectura de la realidad latinoamericana y un
instrumental teórico-analítico y metodológico de la realidad que influenció el
programa de la Unidad Popular (UP) del gobierno de Salvador Allende, electo
presidente en 1970. Tres años después, el golpe de Estado promovido por las
fuerzas militares causó un nuevo exilio de Vania que partió para México donde
impartió cátedra en la Universidad Nacional Autónoma de México. Regresó al
Brasil en los años 1980 y se comprometió en la construcción del nuevo PTB con
Leonel Brizola. Sin embargo, emprendió una crítica del partido y se desafilió
en el año 2000.
Entre sus obras más
importantes figuran:
“A Revolução Cubana – uma
reinterpretação”, que es uno de los mejores trabajos producidos fuera de Cuba
sobre el proceso revolucionario cubano con prólogo de Ruy Mauro Marini. En
castellano: La revolución cubana: una reinterpretación, Editorial Nuestro
Tiempo, México, 1974 (agotado).
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Complejidades de una paradójica polémica: estructuralismo versus instrumentalismo*
-por Mabel Thwaites Rey
*Capítulo
2 de la 2ª parte de “Estado y Marxismo:
Un Siglo y Medio de Debates” (Edit. Prometeo, 2ª edic. 2010, Bs. As.)
Introducción
El propósito de este
capítulo es analizar el aporte realizado por dos autores centrales en el
desarrollo de la problemática del Estado en el marxismo: Ralph Miliband y Nicos
Poulantzas, así como el rico debate que ambos entablaron en los años setenta
del Siglo XX y que se conoció como “instrumentalismo” versus “estructuralismo”.
“Como nunca antes, los hombres viven hoy a
la sombra del Estado”. Con estas palabras inicia Ralph Miliband* la
introducción a su libro El Estado en la
sociedad capitalista, publicado en Londres a comienzos de 1969 y con
prólogo fechado en julio de 1968, poco después de los sucesos del mayo francés.
El libro de Miliband da cuenta de las características que asumió el modelo de
Estado Benefactor en el occidente capitalista desarrollado, así como de los
límites y desafíos que su implantación supuso para la transformación
revolucionaria. Pocos meses antes, Nicos Poulantzas** edita en París su obra Poder político y clases sociales (la
versión original en francés lleva como subtítulo “Del Estado Capitalista”, que en castellano se tradujo como “Poder político y clases sociales en el
Estado capitalista"), en la que también se delimitan los contornos de
la dominación estatal.
Aparecidos estos trabajos, entre 1969 y
1976 se da entre ambos autores una interesante polémica en las páginas de la
revista inglesa New Left Review, y se
abre todo un campo de nuevos estudios, críticas y revisiones teóricas sobre el
Estado capitalista. Como señala Tarcus, la obra de cada uno y el intercambio
entre estos autores, “cierra un ciclo de largo silencio en la producción
teórica marxista sobre el Estado desde los tiempos de Lenin, Trotsky y Max
Adler, sólo interrumpido por la solitaria labor de Gramsci” (Debates sobre el Estado Capitalista,
Miliband, Poulantzas y Laclau, Estudio preliminar de Horacio Tarcus, Ediciones
Imago Mundi, Buenos Aires, 1991)
Este debate entre Miliband
y Poulantzas, convertido en un punto de referencia obligado para la teorización
subsiguiente sobre el Estado capitalista (Hall, 1980; Barrow, 2007) trascendió
en el mundo académico...
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Poulantzas se dirige a una asamblea -Paris, mayo del "68 |
MARX Y EL DERECHO MODERNO
De Nicos Poulantzas. 4° texto incluido en su obra “HEGEMONÍA Y DOMINACIÓN EN EL ESTADO MODERNO”,
De Nicos Poulantzas. 4° texto incluido en su obra “HEGEMONÍA Y DOMINACIÓN EN EL ESTADO MODERNO”,
[Comienza en la página 109]
Es imposible tratar
de exponer los principios generales de un análisis marxista del derecho sin
señalar previamente ciertas deformaciones
que sufrió, durante mucho tiempo, la teoría marxista del derecho. Estas
deformaciones no son específicas de dicha teoría pues forman parte de
corrientes teóricas generales en la historia del pensamiento marxista que
interpretaron de manera errónea a Marx. Si bien es cierto que Marx en ninguna
parte trata del derecho de manera sistemática, o sea como objeto específico de investigación teórica, no es menos cierto que
su teoría nos proporciona algunos principios
para esa investigación. De este modo, las deformaciones de la teoría marxista
del derecho, considerando la relación del derecho y del estado y la importancia
política de este último objeto teórico, reflejan directamente las deformaciones
teóricas y políticas del pensamiento marxista en general.
No es cuestión de hacer aquí un
inventario de esas deformaciones sino de trazar sus lineamientos generales. Sin
embargo, como toda lectura, me inclinaré a dar esos lineamientos exponiendo el
contenido original del pensamiento marxista que precisamente nos proporciona
las claves de un desciframiento sistemático de la historia de sus variaciones
deformadoras.
En efecto, se puede trazar el
esquema de la historia de la teoría marxista del derecho localizando sus
oscilaciones entre una tendencia que se puede caracterizar como
"economista" y otra caracterizada como "voluntarista". No
me extenderé en estas dos tendencias sobre las que insiste Cerroni en su
artículo del presente número de los Archivos, sino que me limitaré a trazar sus
lineamientos principales.
La primera, representada de manera muy característica por Stuchka y
Pashukanis, opera una "reducción" del nivel jurídico a la instancia
económica. Esta tendencia, a pesar del valor teórico de un autor como
Pashukanis, de alguna manera considera al derecho como un reflejo inmediato de
la "base" económica. Para Pashukanis más particularmente, el derecho
privado consiste en un orden de relaciones sociales imitado de las relaciones
de los poseedores de mercancías. Se asemeja a una concepción puramente instrumentalista -[Pág. 109]- de las
superestructuras, que ve en ellas un elemento de la estructura social
directamente determinado por la base económica, de la que se limita a seguir
sus meandros y caminos, más o menos fielmente, como simple apéndice. La
consecuencia teórica de esta tendencia es que el sistema jurídico no aparece en
ella como un objeto específico, teóricamente…
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D - M -
D’ Y EL FIN DEL ‘PROBLEMA DE LA TRANSFORMACIÓN’ de Fred
Moseley, Mount Holyoke College, Mayo 2015. Trabajo a ser presentado el 5/10/15, en la
Conferencia “La Economía Marxista Para Entender el Siglo XXI”, UNAM
Resumen: La razón principal por la que se
ha rechazado la teoría de Marx durante el último siglo ha sido el infame ‘problema de la
transformación’. Los críticos argumentan que Marx, en su teoría de los precios de
producción ‘falló en
transformar los valores’ de los insumos de capital constante y capital variable
a precios de producción y por consiguiente la teoría de Marx está incompleta y
es inconsistente en términos lógicos. Este trabajo argumenta que Marx no falló en ‘transformar
los valores de los insumos’, porque no
se supone que los insumos de capital constante y capital variable
sean
transformados. Al contrario, se
supone que el capital constante y el capital variable permanecen iguales en
la determinación tanto de los valores como de los precios de producción - las
cantidades reales de capital-dinero adelantado para comprar los medios de
producción y la fuerza de trabajo al principio del circuito de capital dinero
(D - M - D’) que son tomados como dados - y por consiguiente la teoría de los
precios de Marx está completa y es lógicamente coherente. Se presenta un
resumen algebraico de esta interpretación “monetaria” de la teoría de Marx en
la Sección 3, así como ejemplos de la evidencia textual que apoyan esta
interpretación “monetaria” en la Sección 4.
“El dinero
es el punto de partida y el
punto de cierre de todo proceso de valorización” (Marx 1977a,
p. 255)
La razón
principal por la que se ha rechazado la teoría Marxista a lo largo del último
siglo es un presunto problema lógico
- el infame ‘problema de
la transformación’. El problema de la transformación está relacionado con la
aparente contradicción ente la teoría del valor trabajo y la tendencia hacia la
igualación de las tasas de ganancia entre industrias con diferentes
composiciones de capital (cociente entre el capital constante y el capital
variable). La teoría del valor trabajo parece implicar que las
industrias con diferentes composiciones de capital deberían tener tasas de
ganancia desiguales, lo cual es contrario a la tendencia de las economías
capitalistas a tener tasas de ganancia iguales entre industrias. Los críticos
argumentan que Marx intentó resolver esta contradicción con su teoría de los
precios de producción en la Parte 2 del Tomo 3 de El Capital, pero que falló en
resolver el problema porque „no transformó los insumos’ del capital constante y
del capital variable pasando de valores a precios de producción. Dejó los
insumos del capital constante y del capital variable en términos de valor, y
esto es lógicamente…
“Hoy en día, Reforma o revolución constituye un
tesoro teórico de primer orden, un auténtico clásico de la literatura marxista
y de la lucha contra la penetración de las ideas de clases ajenas en el seno
del movimiento obrero.” –R. Luxemburgo, p. 14
Rosa
Luxemburgo, militante crítica del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), en
1914 se opuso radicalmente a la participación de los socialdemócratas en la I
Guerra Mundial, disidencia que desembocaría en la creación de la Liga
Espartaquista (1916) y más tarde en la creación del Partido Comunista de
Alemania (KPD). Al terminar la guerra, 1918, fundó el periódico “La Bandera Roja” junto con el alemán
Karl Liebknecht, con quien sería detenida y asesinada el 15 de Enero de 1919,
en Berlín.
Refiriéndonos
al contexto de la obra, escrita en 1900, citamos un fragmento del prólogo hecho
por los editores:
“[…] El
espectacular crecimiento de la influencia y el poder de la socialdemocracia
alemana entre los trabajadores tuvo lugar en
el período de auge económico más importante que el capitalismo había
experimentado hasta ese momento. Los triunfos electorales, el aumento de
concejales y de parlamentarios regionales y estatales, la influencia de los
sindicatos en las nuevas relaciones económicas, favorecieron que una capa cada
vez más nutrida de funcionarios, cuadros provenientes de la aristocracia obrera
y la intelectualidad pequeñoburguesa, se fuese haciendo con el control de la
organización.”
Pp. 12-13
Este
escenario dotó de un aura parsimoniosa y pacífica el arribo al socialismo. En
consecuencia, quedaba atrás la vía revolucionaria y el gradualismo se imponía
bajo el discurso de los éxitos electorales y la acción institucional.
Mediante
la elaboración de este artículo, Rosa Luxemburgo pretendía desenmascarar el
reformismo de Eduard Berstein, se enfrentaban así dos tendencias muy marcadas
en el seno de la social democracia: La marxista, que abogaba por la
transformación socialista de la sociedad con métodos revolucionarios y la
reformista representada por las nuevas formas “democráticas” del Estado
capitalista.
No
se trataba para la autora, de la incompatibilidad entre la lucha por las
reformas y la estrategia revolucionaria, sino que Berstein ofrecía una
alternativa que finalmente perpetuaba el orden social burgués.
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¿QUÉ ES EL MATERIALISMO
DIALÉCTICO? de Otto Kuusinen; Editorial Quimantú, Colección Clásicos del
Pensamiento Social -Santiago, Chile; 1972. 200 páginas.
“La teoría, apartada de la práctica,
se convierte en una flor estéril; la práctica, sin la luz de la teoría, está
condenada a errar en las tinieblas.” O.K.
Otto Kuusinen (1881-1964), fue uno de los dirigentes de la
revolución proletaria en Finlandia, fundador del Partido comunista del mismo
país y miembro del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista, era un gran
redactor de discursos y líbelos, además de escritor de obras de divulgación
marxista, como la que analizamos hoy. Ella resultó elegida por la recordada Quimantú
como uno de los textos claves, junto con su par ¿Qué es el materialismo histórico?, para la introducción al
materialismo en nuestro país. Bueno, hablamos de la floreciente literatura
marxista que tuvo su apogeo en Chile durante las décadas de los 60 y primeros
años de los 70, cuando la lectura no era onerosa.
Bastante amigable al
lector, a ratos algo complicado, pero en definitiva nada que no podamos
entender consultando otras fuentes y dándole las respectivas relecturas, este
manual nos adentra bastante bien en aquella rama del materialismo que no
siempre es bien conocida, que requiere mayor dedicación por su profundidad y
que es una gran arma conceptual a la hora de enfrentar a la ideología burguesa.
El autor nos embarca en
un viaje por la filosofía, exponiéndonos como la milenaria oposición
Materialismo/Idealismo evoluciona hasta nuestros tiempos. Destaca el recorrido
que Kuusinen realiza a fin de demostrar como el Idealismo se ha reencarnado en
diversas corrientes; por ejemplo, incluyendo facciones científicas, las cuales,
ante el análisis preciso, quedan reducidas a la negación de la realidad
objetiva y por tanto, avalando la doctrina Idealista.
Así, nos encontramos con
el idealismo subjetivo -también llamado “solipsismo”-, el Positivismo y su
variante, el Empiriocriticismo -encabezado por E. Mach-, el Existencialismo –al
cual adhería J-P. Sartre- y el Neopositivismo, por nombrar sólo algunos de los
que menciona el autor. Y como no, una cita del propio Kuusinen:
“La gran filosofía
burguesa contemporánea se distingue por la gran diversidad de tendencias y
escuelas. Pero sus corrientes sólo son, en lo fundamental, variantes del
Idealismo Filosófico descarado o encubierto, es decir, de una concepción del
mundo falaz, ilusoria.”
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“Pero no morirá de muerte automática [el régimen
capitalista]. Será siempre necesario darle
un pequeño empujón deliberado para condenarlo definitivamente, y somos nosotros
quienes debemos darlo, el movimiento obrero.” E. M.
Esta obra de análisis, antes que de
propaganda, pertenece a Ernest Mandel (1923-1995), militante revolucionario
belga, director de la “Gauché” en
Bélgica y reconocida personalidad en el campo del marxismo internacional. Ella
constituye uno de los tantos cursos de estudio dictados por el autor; en
particular, éste texto fue utilizado en uno organizado por la Federación de
París del Partido Socialista Unificado, en 1963.
Si
bien en algunos pasajes se vislumbran
interpretaciones propias de su época, en la cual la Unión Soviética aún
se mantenía en pie (con todas las implicancias del caso), las temáticas
tratadas por el autor conforman un aparato conceptual muy completo. Destacan
las páginas relativas a la caracterización y descripción de la competencia
capitalista, la sucesiva concentración de capital y la conformación del campante
capitalismo monopólico -Mandel ya lo había expuesto en los años “60-, realidad
que podemos constatar actualmente en nuestro país, y que además permite rebatir
el concepto de “neoliberalismo”, el
cual se ha colado con fuerza en boca de muchos. He aquí una cita reveladora:
“El capitalismo nació de la libre competencia, el
capitalismo es inconcebible sin la competencia. Pero la libre concurrencia
conduce a la concentración, y la concentración lleva a lo contrario de la libre
concurrencia, es decir, al monopolio. Cuando los productores son pocos, pueden
ponerse de acuerdo en prejuicio de los consumidores, con el designio de
repartirse el mercado, de impedir toda reducción de los precios”
¿No
se le vino a la mente, querido lector, la colusión de los pollos en nuestro
país?
Bien,
continuemos. Mandel plantea que la ley de concentración de capital, propia de
esta sociedad, desencadena el empobrecimiento, la proletarización de una parte
de la clase burguesa, ante la expropiación que un grupo cada vez más reducido
realiza a los de su misma clase. Estas líneas pueden verse reflejadas en el
encarecimiento de las pequeñas y medianas empresas, siempre perjudicadas por
las transnacionales y sus socios locales
o, asimismo, en las consecuencias anticipadas de la reforma educacional de la
NM, en donde...
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IN MEMORIAM ERIC HOBSBAWM, 1917-2012
“La historia
[...] es el registro de los crímenes y de las locuras de la humanidad.
Pero no ayuda a hacer profecías” -E. Hobsbawm
Eric John Hobsbawm nació en Alejandría, Egipto,
el 09/06/17 y falleció en Londres, a la edad de 95 años, el 1º de octubre
pasado. No obstante nacer en el norte africano, pronto su familia
emigró a Europa, pasando su niñez en la Viena posterior a la Gran Guerra, su
adolescencia en Berlín, donde fue testigo de la llegada de Hitler al poder, y
su juventud en Londres y en Cambridge, en vísperas de la Revolución Española. Trabajó hasta el
final de sus días, estudiando y analizando todos los fenómenos sociales que
acarrea el dominio no contrarrestado del capitalismo sobre la humanidad. Se
dedicó con ahínco y gran lucidez a la elaboración intelectual, Políglota (hablaba con fluidez, aparte de su inglés materno, alemán,
francés, español e italiano y sabía leer en holandés, portugués y catalán),
cosmopolita, historiador riguroso pero dotado de una gran fuerza imaginativa,
sentido del humor y talento literario. Recibió innumerables distinciones, entre
ellas varios Honoris Causa (el último
por la Universidad de Gerona, en 2008), y el Premio Bocumer de Historia, también en 2008.
Se le considera uno
de los máximos exponentes de la historiografía marxiana del siglo XX. Comenzó
su carrera como historiador en 1947 y fue profesor en universidades tan
importantes como la de Londres o Stanford, ejerciendo, aún luego de jubilar en
Inglaterra, en la New School Research de Nueva York. Atraído por el marxismo,
ingresó al PCGB, pero tal adscripción no le impidió destacar en su oficio por
una aplicación creativa del materialismo histórico en el estudio de los
fenómenos económico-sociales y políticos que conmovieron al mundo, y en
especial a Europa, desde fines del XVIII y hasta fines del siglo pasado.
Hobsbawm
escribió extensamente sobre una gran variedad de temas. Como historiador marxiano
se centró en el análisis de la "revolución dual" (la Revolución Francesa
y la Revolución Industrial británica). En ellas vio la fuerza impulsora de la
tendencia predominante hacia el capitalismo monopólico transnacional de hoy en
día (que pretende posar de ‘liberal’ o, peor aún, de ‘neoliberal’). En su trabajo
también es un tema trascedente la construcción del Estado nación, el cual, al
final de todo el extenso período que abarca, se llega a convertir en una
molesta rémora para el libre desarrollo y expansión del capital
monopólico-transnacional. Otro tema recurrente en su obra, fue el de los
bandidos sociales, un fenómeno que intentó situar en el terreno del contexto
social e histórico relevante, al enfrentarse con la visión tradicional de
considerarlo como una espontánea...
eXCELENTE RECOPILACION DE FUNDAMENTOS TEORICOS Y PRACTICOS PARA ENTENDER UNA LEECTURA REVOLICONARIA ENMANCIPADORA. TEORI Y PRACTICA COLECTIVA PARA TRANFORMAR E ERRADICAR EL CAPITALISMO Y SU DERIVADO EL NEOLIBERALISMO QUE NO ES OTRO LA PARTICIPACION CASI NULA DEL ESTADO
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