Sin duda que el último encuentro de la
Confech, del sábado 28, refrendó la decisión de lucha de los universitarios.
Además, se reimpulsa la unidad con el resto del Movimiento Popular
¡Chile se Cansó de Esperar!
El llamado a paro nacional indefinido decidido
por los estudiantes agrupados en la Confech luego de su reunión plenaria del
fin de semana, tiene ribetes de un golpe de timón que, por cierto, lanza al Movimiento
Estudiantil (ME) a la izquierda.
Muy
importante fue su invitación a sumarse a la movilización a los profesores y a
los secundarios. Estos últimos, en todo caso, hace rato que están activados y
combatiendo desde sus centros de estudio
No
obstante, el punto que pasará a tener un valor crucial, de llegar a concretarse,
es el aliento a la unidad con los trabajadores, sector que remolonamente está pasando a activarse. Así fue como la Confech emplazó al estudiantado a adherir
al paro nacional de la CUT, el que se había fijado para éste martes 31, pero
desde un punto de vista de unidad en la acción. Claro, todos/as sabemos que la
CUT practica la política de la presión con freno, pero bien vale aprovechar la
coyuntura y darle un contenido rupturista y de clase a ésta y a toda
movilización que permita librar en las calles la lucha político-ideológica que
tanta falta hace a estas alturas del partido.
En
línea con lo anterior, se hace necesario que el ME –sobre todo universitario- avance
por dos vías que no son incompatibles entre sí, sino que complementarias: una,
la de las protestas y movilizaciones sectoriales, donde se encuadra el llamado
a Paro Nacional Indefinido, así como la Protesta Nacional del próximo jueves 9
de junio; la otra, la que debe apuntar a acompañar, potenciar e inclusive
forzar la movilización de los trabajadores y los pobladores, quienes deben ser
sumados e integrados activamente a un Movimiento Popular que, en definitiva, es
el que debe asumir la pelea mayor, nacional, estratégica, contra el enemigo
común.