"’Yo
me rebelo, por lo tanto existimos’, escribió el filósofo francés Albert Camus.
Además, añadió: ‘El sentimiento de la rebelión nace en la opresión’"
Traducción de: “Manipulating Human Minds”
Por Andre Vltchek*
LA MANIPULACIÓN
DE LAS MENTES HUMANAS
¿Podría algún dictador desear más? ¡Casi
la totalidad de la población del Imperio está ahora pensando de la misma
manera!
La población es
"educada" en escuelas y universidades, dotadas de sumisos y cobardes
maestros y profesores.
La gente es
"informada" por cientos de miles de periodistas y “analistas” serviles. Casi no hay desviación respecto del discurso oficial.
¡Felicitaciones,
Imperio Occidental! Has tenido éxito donde otros han tratado y fallado. Has
conseguido la casi absoluta obediencia y disciplina; un total servilismo.
Y más que eso, la
mayoría de las personas piensan que son libres, cuando en realidad están bajo control.
Creen que ellas pueden elegir, que pueden decidir. ¡Están seguras de que la
suya es la civilización más grande jamás construida sobre la Tierra!
*****
Decenas de
millones se están alineando, voluntariamente, solicitando ser "educados",
y, eventualmente, conseguir uno de aquellos grados oficiales imperiales.
Quieren ser aceptados, certificados y elogiados por los gobernantes.
Las personas están
ofreciendo sus propias cabezas, inclinadas, para un complejo y prolongado acto
de lobotomía. A cambio de piezas de papel estampado denominados diplomas los
hombres y las mujeres pierden, para siempre, su capacidad de pensar de manera
independiente, de analizar y de ver el mundo con sus propios ojos. Como una recompensa
por su sumisión, sus posibilidades de conseguir posiciones de prestigio en la
elite empresarial, académica y en otras divisiones del régimen, aumenta
notablemente.
El extremo grado
de conformidad de la mayoría de los hombres y las mujeres que viven en nuestras
sociedades supera lo descrito en libros tales como Fahrenheit 451 y 1984,
donde ello es sólo moderadamente preocupante. Nuestra realidad de "2015"
es mucho más psicodélica, bizarra y terrible… ¡así como vergonzosa!
La mayoría de los
ciudadanos están dispuestos, inclusive, a pagar de sus propios bolsillos (o el de
sus familias) por esa "educación" y por las difundidas cirugías
cerebrales; están deseosos de entrar a endeudarse a fin de conseguir ser bien programados
y adoctrinados. Varios años más tarde, cuando todo ha acabado y ya no queda
nada de su individualidad, sus pechos se hinchan de orgullo y a menudo lloran
cuando reciben ese trozo de papel estampado, el cual, de hecho, sólo significa
una cosa: "Aprobado, aceptado y certificado- listo para servir y para ser utilizado
por el Imperio y su régimen fascista".
Millones de
extranjeros se están alineando también para esta lobotomía. Aquellos que
provienen de los países colonizados y destruidos, a menudo son los más ansiosos.
Los hijos de las elites están trastornados por recibir el sello de aprobación
del Imperio, por ser moldeados, por combinarse con las masas en Europa o en
América del Norte. Después de "graduarse" y de volver "a
casa", cuelgan sus diplomas en las paredes y agregan todo los títulos en
sus tarjetas de visitas, aumentan sus tarifas, y exigen respeto por sus métodos
occidentales y su colaboración intelectual con el Imperio. A continuación,
muchos de ellos terminan muy ocupados robando y, adicionalmente, adoctrinando a
sus compatriotas en nombre de Occidente.
En muchos países,
ni siquiera hay razón para salir de casa. El lavado de cerebro occidental está fácilmente
disponible a través de innumerables escuelas privadas cristianas e
"internacionales", a través de iglesias, "instituciones
culturales" y, por supuesto, a través del "entretenimiento".
Más aún, países
como China, que cuenta con una cultura mayor y más antigua que aquella de
Occidente, en la actualidad han sido terriblemente influidos por sus propios
hijos e hijas, los que han sido programados para creer en la grandeza de la
civilización occidental. Ellos/as fueron, o bien adoctrinados en la "educación"
occidental en el extranjero, o bien por los ejércitos de “educadores"
occidentales, de "eruditos" y de predicadores que están cada vez más
ocupados viajando y difundiendo su tóxico evangelio por todo el mundo.
En lugar de serles
otorgado un conocimiento multifacético y multicultural, los alumnos y los
estudiantes han recibido precisamente calculadas dosis de adoctrinamiento, bien
probadas durante siglos de imperialismo y colonialismo. Por ahora, el Imperio
sabe extremadamente bien cómo manipular la mente de los humanos. Las personas
que son violentadas se ven obligadas a creer que se les hace el amor. A
aquellos que se son indiscriminadamente robados se les enseña a alabar a las
potencias coloniales por construir sus edificios administrativos y
ferrocarriles, y la gente "en casa" es instruida para no sentir vergüenza
por su pasado y presente.
En lugar de fomentarles
el que piensen de manera independiente, en lugar de pedirles que revolucionen su
manera de pensar, las personas están siendo atadas, contenidas, por austeras
limitaciones intelectuales.
La valentía y la independencia
de criterio son sistemáticamente calumniadas y menospreciadas. Las almas
rebeldes son marcadas como “no aptas para el empleo", casi como
antisociales.
La cobardía, la sumisión
y la mediocridad son promovidas y comercializadas por el extremadamente complejo
y multifacético sistema de propaganda, publicidad, de "eventos culturales
y de entretenimiento" y por los medios de comunicación.
En un mundo totalmente
uniforme, donde incluso la "cultura" y los medios están al servicio
del Imperio y sus intereses comerciales monopolistas, los Nuevos Hombres y las
Nuevas Mujeres se están modelando a partir de la arcilla intelectual; a
continuación, se les/as coloca sobre masivos pedestales: todos/as ellos/as altos/as
y delgados/as, todos/as regurgitando articuladamente clichés en voz alta, evitando
cuidadosamente las cuestiones reales, comunicándose intensamente con los demás acerca
de nada, a la vez que manteniéndose terriblemente ignorantes respecto del
mundo.
Los/as Nuevos/as
Humanos/as son pura sonrisa y todos/as lucen muy relajados/as. Conducen lo más
reciente en coches y portan modernos aparatos en sus manos. Están seguros de sí
mismos y son infinitamente egoístas. Sus nalgas son cada vez más
estereotipadamente "perfectas".
Muchos de ellos utilizan
sedantes, antidepresivos o drogas. La mayoría de ellos son miserables, inseguros
de sí mismos, infelices con su trabajo, desgraciados con sus familias, incapaces
de encontrar o de mantener a su segunda mitad. Todo ello, por supuesto, ¡no se
muestra! ¡En la superficie, innumerables hombres y mujeres occidentales se ven
deslumbrantes!
Los fascistas
italianos y alemanes intentaron desesperadamente crear este tipo de confiada, pero
obediente raza de super-humanos.
Todos ellos
fracasaron.
¡Sin embargo, éste
Imperio está teniendo éxito! Por primera vez en la historia de la humanidad
existe la posibilidad de que los robots puedan realmente sustituir a los seres
humanos. No por robots fabricados en plástico y metal, sino que por seres
humanos re-acondicionados, reciclados en robots.
El fascismo italiano,
el nazismo alemán, el corporativismo de los Estados Unidos, el imperialismo, el
racismo, el colonialismo, el excepcionalismo, la propaganda, la publicidad, la
"educación", todos/as ellos/as han sido hábilmente entrelazados/as.
¡Enhorabuena,
Imperio! Tú eres el primero que ha conseguido estandarizar a los seres humanos
y su pensamiento.
*****
No resulta fácil
enfrentar dicho tipo de imperio, intelectualmente hablando.
No es sólo lógica
o filosofía aquello que ha de ser confrontado; lo que nos desafía.
También hay miles
de percepciones, dogmas, códigos; todo aquello que sirve al mismo propósito: mantener
a la gente alejada de la realidad y del pensamiento independiente y analítico.
La mayoría de los
ciudadanos del Imperio occidental están, en realidad, mucho más adoctrinados que
los miembros de grupos tales como el Talibán o el EIIL (Emirato Islámico de
Irak y el Levante -N de T), porque el Imperio trabaja muy duro y emplea a
millones de profesionales para que creen conceptos extremadamente eficaces para
el control de la mente humana: desde ideólogos a psicólogos, publicistas,
educadores, artistas, periodistas y a otros seres altamente especializados.
Desde los medios
de comunicación social a las telenovelas, las películas de Hollywood, la música
pop y las cadenas de televisión, casi todo conduce en la misma dirección y
arrastrando las personas lejos de los principios básicos del humanismo. Les
obliga a pensar no como un grupo de seres racionales, protectores y compasivos.
La realidad es
banalizada o bien llevada a niveles fantasmagóricos, en donde ninguna lógica
puede aplicarse de manera eficaz.
El curso más
importante del pensamiento humano –lo que se piensa de, el sueño de y el diseño
de nuevas y mucho mejores y más amables formas de sociedad humana-, está
totalmente ausente de la narración con que la cual los hombres, las mujeres y la
infancia del Imperio, y sus colonias, se enfrentan a diario.
A los ciudadanos
del Imperio se les impide pensar y actuar de forma natural. Como resultado de
ello, se sienten frustrados, deprimidos y confundidos. Pero, en lugar de
rebelarse (la mayoría de ellos ya no son capaces de ello), se vuelven cada vez
más agresivos. En circunstancias que las víctimas del Imperio, en todo el
mundo, están siendo asesinadas, explotadas y humilladas, la disposición mundial
no es, en realidad, de mucha alegría (aunque si de muchos beneficios
materiales) para los ciudadanos del Imperio -los europeos y los
norteamericanos.
En el otro
"extremo", miles de millones de personas de las ex colonias y en el
neo-colonias también son bombardeadas, de manera constante, con los mismos
retorcidos, reciclados y modificados mensajes. Se enfrentan a una avalancha perpetua
de propaganda (ligeramente modificada para cada región en particular), transmitida
día y noche desde las salidas de adoctrinamiento del Imperio: sean las
telenovelas, el grado más bajo de películas y juegos de video (la misma cosa, en
verdad), música pop con repetitivas letras aplasta-cerebros, "arte"
decorativo desdentado, o las "noticias" transmitidas y aparecidas en
los principales órganos de prensa. Estos mensajes se difunden a través de los
medios de comunicación locales, los que, a su vez, están controlados principalmente
por los intereses empresariales, los que decididamente colaboran con el régimen
mundial, occidental.
El Imperio dispone
del mundo de manera escandalosamente racista y brutal, pero la mayoría de sus ciudadanos,
inclusive sus súbditos en las tierras saquedas, se ven forzados a creer que en
verdad es el más "tolerante" y "progresista" sistema sobre
la Tierra.
*****
¿Hay alguna
esperanza de que la humanidad pueda sobrevivir a ésta idiotez de producción en masa?
Sí, ¡por supuesto
que la hay!
La lucha está en
marcha.
No son sólo las
maniobras navales rusas, chinas o iraníes las que cuestionan en la actualidad
al imperialismo occidental.
No son sólo los
latinoamericanos y los sudafricanos quienes han hecho decididos esfuerzos por reescribir
la historia y por armar al pueblo con el conocimiento, en lugar de diplomas.
El quizás más
grande cineasta europeo vivo, Emir Kusturica, escribió recientemente, con
sarcasmo, que: "La Tercera Guerra Mundial comenzará con el Pentágono
bombardeado por RT", refiriéndose a la poderosa red de televisión Russia Today. RT comentó: RT es una
amenaza real para la propaganda estatal de EE.UU., ya que llega a los
estadounidenses "en sus propias casas, en perfecto inglés, mejor que el
que utilizan en CNN." Y es por eso por lo que, según el cineasta,
Washington pudiera hartarse y buscara silenciar a RT a la fuerza, al igual como
la OTAN hizo con la TV estatal de Serbia, en abril de 1999.
A su vez,
Kusturica predice que Moscú podría destruir CNN, al que considera el portaestandarte
de la propaganda estadounidense: "en transmisiones directas, CNN asegura
que desde la década de 1990 Estados Unidos ha liderado las acciones
humanitarias y no las guerras, ¡y que sus aviones militares hacen llover ángeles,
no bombas!""
Aunque algunos de
los más grandes pensadores confrontados con el Imperio: Saramago, Galeano, y
Pinter, han fallecido recientemente, aún existen muchos de aquellos que son
capaces de escapar al adoctrinamiento. Algunos se están reagrupando en torno a
las nuevas redes de televisión no-occidentales, tales como TeleSUR, RT y
PressTV.
Es como el Fahrenheit 451 de Ray Bradbury, todo de
nuevo. Algunas personas, tercamente, se niegan a quemar sus libros.
Incluso en el
Oeste, algunos poderosos medios de comunicación -Dissident Voice, CounterPunch, ICH, VVN, Global Research, y otras- están
sosteniendo la línea. Aún no están ganando, ni mucho menos, ¡pero tampoco se
están muriendo!
En tanto el
pensamiento independiente esté vivo, no todo está perdido.
"Yo me
rebelo, por lo tanto existimos", escribió el filósofo francés Albert Camus.
Además, añadió: "El sentimiento de la rebelión nace en la opresión".
El Imperio niega
que oprima al mundo. Sus adoctrinados, tanto los opresores como los oprimidos,
re-definen, de hecho "re-denominan", la opresión como libertad.
Aquellos de
nosotros que somos capaces de escapar a su adoctrinamiento, ahora nos estamos rebelando.
Por lo tanto, la humanidad aún existe.
El campo de
batalla se está volviendo muy bien definido: ahora tiene que ver sobre todo con
la información y el conocimiento.
Los hechos, los
trucos, realizados por el Imperio son sucios, horrendos, pero muy transparentes.
Pueden ser aceptados o tolerados por miles de millones sólo por la constante repetición
de las mentiras, y debido a los retorcidos conceptos martillados en el cerebro
de las personas a través de la "educación oficial".
La guerra por la
supervivencia de la humanidad ya está siendo librada. Es “La Gran Guerra Humanista",
la guerra dentro de los cerebros y corazones de las personas, no sobre el
territorio. Puede ser también llamada la "guerra de la información";
una guerra de "desintoxicación” o una guerra para llevar a los seres
humanos de vuelta a la vida desde su intoxicación intelectual, desde su aletargamiento
y servilismo. Una guerra por un mundo mucho mejor, una guerra que pondría el conocimiento
por sobre los títulos y sellos; calidez humana y bondad por encima de la
violencia y la agresión; y los seres humanos por sobre las ganancias y el
dinero.
La victoria sólo
puede llegar acompañada con el conocimiento, con el pensamiento independiente,
con el humanismo racional, con la compasión y la solidaridad, y con el calor humano.
*Andre Vltchek es un novelista, cineasta y reportero de
investigación. Ha cubierto guerras y conflictos en docenas de países. Su más
reciente libro es “Exponiendo
las Mentiras del Imperio”. Además, junto con Noam Chomsky, “Sobre el
Terrorismo Occidental: desde Hiroshima a la Guerra Teledirigida”. Andre
está realizando películas para TeleSUR y Press TV. Luego de vivir por muchos
años en Latinoamérica y Oceanía, actualmente reside y trabaja en Asia oriental
y el Medio Oriente. Puede ser contactado a través de su página web o mediante su Twitter. Leer otros artículos de
Andre.
Equipo Internacional –CAD CHILE
Octubre 5 de 2015
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