José Wenuche sale con su hija desde el tribunal de Cañete, 21/10/15 |
“JUICIO
EN CAÑETE Y LA DEUDA HISTÓRICA QUE QUIERE SALDAR EL ESTADO CHILENO ENCARCELANDO
A COMUNEROS MAPUCHE”
En Mapuexpress
Octubre
23, 2015
“A continuación extendemos el reportaje de la Red informativa Tz´ikin y televisión
de Guatemala relacionado a reciente juicio desarrollado en Cañete, cuyo hecho
lo explica en el contexto político del País"
¿Democracia?:
la deuda histórica que Chile quiere saldar encarcelando al Pueblo Mapuche.
Desde el día 13 de
octubre hemos asistido a una metáfora de la relación que guarda el Estado
Chileno con el Pueblo – Nación Mapuche; reduciendo y resumiendo una lucha
territorial en el marco de un delito común: el hurto de madera.
Poniendo
en primera instancia y todas las herramientas del Estado en función y defensa
de la mercancía por encima de las nociones no mercantiles de la naturaleza que
tienen los Pueblos Originarios, en este caso principalmente el Pueblo Mapuche.
No
es menor y no deja de ser sorprendente que un Estado que se ufana de haber
ratificado el convenio 169 de la OIT y que en estos momentos es acompañante del
proceso de paz en Colombia, si, acompañante para el fin de un Conflicto Armado
Interno que vive nuestro hermano país Colombia, el cual tiene en común
que una de sus principales y más complejas raíces en un problema aún
irresuelto, pero además evadido por Chile: la estructura de la tenencia de la
tierra. Detalle que no es menor si tenemos en cuenta que la política de
relaciones exteriores de Chile hace énfasis en que su país es garante del
Estado Social de Derecho, situación que se pone día a día en cuestionamiento
tras los tratos que reciben los Pueblos Originarios, en especial el Pueblo
Mapuche, por el Estado Chileno.
Juicio contra el
líder Mapuche José Wenuche Reiman, 20 de octubre 2015. En la imagen: el Fiscal
– Ministerio Público (lado izquierdo), representante de Empresa Forestal
Mininco (Centro), Intendencia de la Región del Bío Bío (derecha). Los tres
constituidos como partes querellantes en contra de los líderes Mapuche
Estudios
recientes han indicado que Chile es uno de los países en los cuales los Pueblos
Originarios tienen menor porcentaje de propiedad de la tierra que
ancestralmente ocuparon y que en su gran mayoría han sido objeto de despojo y
usurpación, tanto del Estado como de terceros, específicamente para el caso Mapuche;
empresas forestales que han contado con el apoyo y anuencia del Estado.
De
lo que fuimos testigos, fue de un Chile representado en las partes
querellantes, que no solo lo son en un papel, sino que se hablan al oído
durante todos los juicios y salen hablando juntos y riéndose mientras pu machi,
pu lonko y autoridades ancestrales citadas como testigos al juicio hablan; si,
hablamos que en un lado del tribunal está el Fiscal, a su lado representantes
de la Empresa forestal Arauco y el intendente de la región del Bío Bío. Ellos
están ahí pidiendo al unísono una sentencia condenatoria para el werken de la
comunidad de Huentelolen, Mario Cayupi y para el Kuriche y reconocido luchador
de las justas demandas del pueblo Mapuche; José Huenuche Reiman, a quien en
ocasiones anteriores el Estado Chileno ha encarcelado, queriendo con esto
frenar su papel en los procesos de recuperación territorial que adelanta el
pueblo Mapuche.
De
parte del Fiscal, la Empresa Forestal y la Intendencia se han hecho escuchar
toda serie de argumentos tendientes a conseguir la condena.
En
este panorama se han evidenciado situaciones denigrantes de la justicia
chilena, tal como sucedió el día 19 de octubre en el marco del juicio que se
adelanta en contra de el werken y el kuriche Mapuche en el Tribunal de Juicio
Oral de Cañete. Mientras se daba la presentación del Lonko Juan neculqueo, tras
las preguntas del Abogado defensor, sobre el lugar donde se hacen las
Rogativas, señalando el Lonko de Huentelolen que: “esas tierras ahora son de Milinco,
pero son verdaderamente de nuestros antepasados y eso, señores abogados
nosotros lo vamos a luchar hasta las últimas consecuencias, hasta recuperar las
miles de hectáreas que nos tienen usurpadas esas empresas“, se hizo sentir un
largo, sentido y profundo afafán (Grito de fuerza Mapuche, que puede ser
equiparado sin tener comparación en un aplauso) se hizo sentir en la sala, tras
lo cual el juez indicó y amenazó con desalojar y que debían hacer silencio, así
mismo como el Fiscal planteó que esto era
una falta de respeto al Tribunal y que en estos momentos estaban sometidos a la
jurisdicción chilena y que eso era lo que había; que se tenían que someter a la
jurisdicción chilena, en sus propias palabras. Acto seguido el abogado defensor
hizo alusión al convenio 169 de la OIT ratificado y reconocido en la
constitución y jurisdicción chilena formalmente desde el 15 de septiembre del
año 2008 y que por eso preguntaba al lonko para el conocimiento de los
asistentes el significado del afafán, ante lo cual el Fiscal expresó que la
pregunta no debía ser tomada en cuenta por “impertinente“ en sus propias
palabras, siendo así confirmado por el juez, quien decidió “no dar lugar a la
pregunta por impertinente“ otra vez en sus propias palabras.
Al
respecto vale la pena señalar solo algunos de los artículos del Convenio 169 de
la OIT que han sido pisoteados en un juicio oral, poniendo énfasis en que esto
ha sido solo en una parte del juicio, porque no daría el espacio para
evidenciar toda la situación y es este el papel y por tanto el llamado a los
Organismos internacionales para la verificación de las situación real de
cumplimiento del Convenio 169 de la OIT en el territorio del Wallmapu. Si bien
es cierto Chile reposa con reportes de cumplimiento de dicho convenio, con solo
evidenciar los allanamientos, los encarcelamientos con falta de pruebas, los
juicios y sobretodo las palabras para referirse a la cultura y conocimientos de
los Pueblos Originarios que tienen gran parte de los funcionarios públicos,
podemos decir que es un cumplimiento de papel.
Instamos
a los Organismos internacionales a que verifiquen la situación de vulneración
de Derechos Humanos, Derecho Internacional Humanitario, Convenios y tratados
internacionales ratificados por Chile para garantizar el ejercicio de derechos
de sus Pueblos Originarios, entre otros.
En los siguientes videos, del juicio en Cañete, se puede apreciar
las declaraciones de José Wenuche Reiman
el día 20 de octubre. Primera vez que habla en el marco del juicio.
Tras
este escenario estamos ante un Estado que en su estructura misma no está
pensado para dialogar y velar por el cumplimiento de los convenios que ha
ratificado, así mismo como día a día maltrata y ultraja por la vía jurídica a
los Pueblos Originarios, desconociendo sus justas demandas, pues tal como lo indicó
el mismo Fiscal y lo indicaron tanto la Empresa forestal y el intendente: lo
que vale es quién ejerce como dueño y señor (es decir, quién tiene un papel –
escritura – documento) que le acredita como propietario, siendo conocido por
todos y todas que hay un hecho concreto que es el despojo y la usurpación de
las tierras ancestrales, lo cual después de todo lo que hemos evidenciado, no
admite críticas de parte del Estado.
Artículo
5
Al
aplicar las disposiciones del presente Convenio:
a) Deberán reconocerse y protegerse los valores
y prácticas sociales, culturales, religiosos y espirituales propios de dichos
pueblos y deberá́ tomarse debidamente en consideración la índole de los
problemas que se les plantean tanto colectiva como individualmente
Artículo
12
1.
(Los pueblos indígenas tienen derecho a manifestar, practicar, desarrollar y enseñar
sus tradiciones, costumbres y ceremonias espirituales y religiosas…)
Artículo
13
1.…
Los gobiernos deberán respetar la importancia especial que para las culturas y
valores espirituales de los pueblos interesados reviste su relación con las
tierras o territorios, o con ambos, según los casos, que ocupan o utilizan de
alguna otra manera, y en particular los aspectos colectivos de esa relación.
2.
La utilización del término tierras deberá incluir el concepto de territorios,
lo que cubre la totalidad del hábitat de las regiones que los pueblos
interesados ocupan o utilizan de alguna otra manera.
Todos
los argumentos han estado relacionados con poner en evidencia que es un Estado
defendiendo sus árboles de Eucalyptus y de Pino, defendiendo a las empresas
forestales que han ocupado de manera indiscriminada gran parte del territorio ancestral
habitado por los Mapuche, pero además un Estado que no quiere escuchar y acoger
los conocimientos de esta historia que tienen los sabios y mayores, poniendo en
duda mediante cuestionamientos sin sentido su pertenencia al mismo.
Para
la empresa forestal, para el intendente y para el fiscal, Chile empieza cuando
llegan estas familias foráneas y se apropian de las mismas, Chile es lo que
representa para la economía el cultivo, procesamiento y exportación de esta
manera y Chile sería mejor si se encarcela a quienes se oponen a este modelo
económico, pues en el juicio han sido señalados no como werken y kuriche, sino
como “delincuentes comunes“ y esto causa heridas y dolores, siendo señalado así
mismo por los Mapuche que si encarcelan a uno se levantan diez. Se pone en
evidencia que este conflicto y esta lucha no es tan material como una cárcel,
con una multa y con una condena, porque esta es una lucha que inicia antes de
la llegada de las forestales y que con su instalación y legalización del
despojo y usurpación, lo único que están haciendo es que crezca el sentimiento
de indignación ante las injusticias, porque no es posible vender la imagen de
ser una democracia estable, de estar aplicando el Convenio 169 de la OIT y de
tener decretadas y reglamentadas las consultas previas, cuando en la vida real
el Estado funciona para la defensa de la propiedad privada, por encima de los
conocimientos, saberes y prácticas de sus Pueblos Originarios.
A
continuación vea el video con las declaraciones finales de Mario Cayupi, Werken
de la comunidad de Huentelolen, en el marco de un juicio injusto adelantado en
su contra que ha reducido sus recuperaciones territoriales (recuperaciones
productivas y espirituales) a un delito común: hurto de madera.
Videos con las declaraciones de Mario Cayupi, Werken de la
comunidad de Huentelolen; palabras
finales en el marco de un juicio injusto adelantado en su contra que ha
reducido sus recuperaciones territoriales (recuperaciones productivas y
espirituales) a un delito común: hurto de madera.
El
día 21 de octubre del año 2015 este Tribunal de Juicio Oral de Cañete declaró
como culpables a estos dos dirigentes del mundo Mapuche, desconociendo no solo
los peritajes que fueron presentados, dentro de los cuales destacan a pu lonko,
pu machi, arqueólogos, historiadores y antropólogos, que dieron cuenta de que
esto va más allá de un delito común y está enmarcado en trabajos que apuntan a
la recuperación del territorio en el sector de Huentelolen.
La
empresa forestal, así mismo como el Intendente del Bío Bío y el Ministerio
Público encabezado por la Fiscalía, solicitaban que a José Huenuche se le
mantuviera privado de la libertad lo máximo que permite la ley, alargando sus
ya 9 meses de prisión política en la cárcel de Lebu y tratándole en palabras
del señor Fiscal como un peligro para la sociedad. Tras los argumentos de la
defensa y en contra de los deseos del Fiscal, Intendente y Forestal José quedó
libre siendo este un logro, puesto que no es justo mantenerlo encarcelado ya
después de 9 meses en los cuales no hay pruebas contundentes en su contra.
Es
por esto que si bien es cierto Chile ha acogido en el formalismo todas las
observaciones hechas por organismos internacionales de Derechos Humanos, tales
como el dejar de aplicar la ley anti terrorista hacía el pueblo Mapuche, vemos
que se utilizan mecanismos alternativos para criminaliZAR sus demandas
relacionadas con los reclamos de tierras y la recuperación del territorio que
ha sido usurpado y despojado.
Y
sigue vigente en este aspecto, elementos que en su momento fueron presentados
como argumentos para incidir en la no aplicación de la ley anti terrorista,
entre otros por la Human Rights Watch “Hoy en día, gobiernos de países de todo
el mundo están intentando usar medidas antiterroristas o de seguridad nacional
para evitar el escrutinio internacional de prácticas dudosas en materia de
derechos humanos” (ver enlace aquí).
Así mismo se
evidencia lo que ya han señalado en el año 2004 HRW:
“Actualmente, al
parecer, Carabineros no cuenta con ningún mecanismo para vigilar el respeto por
las normas de derechos humanos durante las operaciones policiales en las zonas
afectadas por conflictos de tierras. El gobierno tampoco ha avanzado
significativamente los planes anunciados antes de las elecciones que pusieron
fin al gobierno militar en 1989, para crear una defensoría del pueblo o
procuraduría de derechos humanos. Dicha oficina podría suponer una importante
contribución a la mejora del respeto por los derechos humanos en las regiones
afectadas por los conflictos de tierras, ofreciendo a las víctimas una oportunidad
de resarcimiento independiente de los tribunales y ayudando a mediar en bandos
rivales” (ver
enlace aquí).
Para
finalizar vale la pena recordar las palabras y convicciones de José y
Mario, cuando plantean que “es una lucha que hemos heredado y que no queremos
traspasar a nuestros hijos, no queremos que nuestros hijos sean baleados o
asesinados, no queremos transmitir los errores a las nuevas generaciones,
queremos salir de la pobreza económica y espiritual en la que se encuentra
nuestro pueblo como consecuencia del sometimiento al que ha estado expuesto“.
Texto
y registro audiovisual: Cem Anahuac y Red Tz’ikin en conjunto con José Wenuche,
familiares y amigos. Foto José Wenuche: Camilo Tapia
¡LIBERTAD A TOD@S L@S PRES@S POLÍTIC@S
MAPUCHE!
¡FUERA TODOS LOS USURPADORES DEL WALLMAPU!
¡WEUWAIÑ!
Colectivo Acción Directa 8a – Chile
Octubre 25 de 2015
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