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viernes, 4 de agosto de 2017

CONDENAN A DINOS POR DESAPARICION FORZADA DE LA CRA. SONIA BUSTOS, UNA DE L@S 119 DE LA ‘OPERACION COLOMBO’


La condena, de primera instancia, recae sobre connotados criminales de lesa humanidad de la DINA. Sonia era una esforzada combatiente del MIR y la Resistencia Popular, que fuera detenida por esbirros de la Brigada Caupolicán del ente terrorista en septiembre de 1974, en Santiago, siendo llevada a varios centros de tortura y muerte, para luego ser hecha desaparecer

Por su responsabilidad en el delito de desaparición forzada (secuestro calificado) de la compañera del Movimiento de Izquierda Revolucionaria MIR SONIA BUSTOS REYES, detenida el 5 de septiembre de 1974, en Santiago, y una de las 119 víctimas del montaje dictatorial denominado "Operación Colombo", el ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los DD.HH. de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, condenó a tres exintegrantes de la fatídica Dirección de Inteligencia Nacional (DINA).

En su fallo, el ministro Carroza condenó a los infelices sicarios César Manríquez Bravo, Ciro Torré Sáez y Orlando Manzo Durán a penas de 7 años de presidio, en calidad de autores del delito.

Respecto de la compañera Sonia Bustos, un hermano nos cuenta que ella había nacido en la ciudad de Santiago, el 13 de Mayo de 1944. Provenía de una familia modesta, esforzada, de trabajadores, que vivió siempre con la dignidad y la decencia que ha caracterizado a nuestro pueblo. Realizó sus estudios primarios en el Colegio Hispano-Chileno, destacándose como una alumna especialmente eficiente con sus obligaciones. Posteriormente, ingreso al Instituto Superior de Comercio, lugar en el cual se recibió de secretaria de Contabilidad. Ejerció su profesión en empresas privadas, lugares donde combatió fuertemente la política de explotación de los patrones. Su sensibilidad social y deseos de cambiar la injusta sociedad en la que vivía le llevaron a integrarse al MIR.

A la fecha del Golpe militar, la compañera se encontraba laborando en la secretaría del casino de Investigaciones, ello hasta el momento de su detención, el 5 de septiembre de 1974, por efectivos de la DINA comandados por el desalmado criminal Osvaldo Romo Mena (fallecido). Este hecho injurioso fue perpetrado en presencia de su madre, hermanas y pequeños sobrinos. Los delincuentes que la apresaron, según el fallo del ministro Carroza, “señalaron pertenecer al Servicio de Inteligencia Militar, pero correspondían a efectivos de la Brigada Caupolicán de la DINA, y que la subieron a un vehículo que los esperaba en la vía pública, sin que existiera orden emanada de autoridad legítima y competente que la justificase, trasladándola a un lugar hasta ese minuto desconocido.”

Una semana después, se llevaron detenidos a su hermana Rosa y al novio de Sonia, Carlos, quienes estuvieron con ella en el secreto centro de exterminio de la DINA de calle José Domingo Cañas N°1367, comuna de La Reina, conocido como "Ollagüe" (a cargo del ex oficial de carabineros y dino  Ciro Torré Sáez), y en el Campo de Prisioneros Cuatro Álamos (cuyo jefe era el ex oficial de gendarmería –y también dino- Orlando Manzo Durán), “lugar éste último desde donde se le ve por última vez en el mes de octubre de 1974, tras anunciar a otras detenidas que sería dejada en libertad, sin que a la fecha se tengan noticias de su paradero”, agrega el fallo. A fines de ese año son liberados Rosa y Carlos, luego de fuertes torturas físicas y psicológicas.

La sentencia continúa: “existen antecedentes proporcionados por testigos acerca de las torturas y malos tratos a los que eran sometidos los detenidos por el personal de la DINA, a cuyo cargo se encontraban, entre otros, estos dos recintos y desde donde operaban, en el caso de José Domingo Cañas, Brigadas Operativas estructuradas jerárquicamente. Por esta razón, es dable pensar que la víctima mientras permaneció detenida recibió igual trato consistente en mantenerla con la vista vendada, muchas veces atada de pies y manos, en deficientes condiciones higiénicas, y sometida a apremios físicos y psicológicos.”

Finalmente, se inscribe en la condena que, “el nombre de SONIA DEL CARMEN BUSTOS REYES apareció en la lista de los 119 militantes que de acuerdo a publicaciones de prensa aparecidas en el extranjero (Argentina y Brasil) replicadas en nuestro país por el diario La Segunda, supuestamente fallecieron a consecuencia de enfrentamientos, sin que la veracidad del hecho pudiera ser corroborada, toda vez que pudo determinarse, no solo en esta investigación sino en otras llevadas por otras víctimas, que ello correspondió a maniobras de desinformación efectuadas por agentes de la DINA en el exterior y que fueron tomadas con ese propósito en el país".

Importante resulta añadir que, transcurrido un tiempo luego de la desaparición de la compañera Sonia, su madre visita a una presa política en la casa correccional de mujeres de Santiago, quien le entregaría el testimonio que Sonia fue sacada de "Cuatro Álamos", en septiembre del año 1974, por efectivos de la DINA y que luego no supieron más de ella. La sufrida mamá no pudo resistir la ausencia de su infortunada hija y falleció al poco tiempo, pronunciando su nombre y pidiendo a los miembros de su familia que nunca abandonasen su búsqueda.

Por cierto, es un deber de las organizaciones de defensa y promoción de los DD.HH., de la izquierda consecuente, movilizarnos para que en éste y otros tantos casos de compañer@s caídos durante la noche obscura de la tiranía se haga verdad, justicia y reivindicación del ejemplo de valentía y consecuencia de es@s camaradas, quienes ofrendaron sus vidas para acabar con la injusticia y construir una sociedad mejor.
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¡Ni Olvido Ni Perdón: Verdad, Justicia y Memoria!
¡Sólo la Lucha y la Unidad Nos Harán Libres!

Colectivo Acción Directa CAD –Chile
Agosto 4 de 2017

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