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| Santiago, 29 de septiembre de 2016 |
Hubo Paro y Protesta Nacional el 29 de septiembre, pero luego la cosa
se ha enfriado más que pata de pingüino
L@s trabajadores de los servicios públicos, centrales y descentralizados, del
país exigen un aumento de 7.5% en sus sueldos, mientras que el gobierno de la Nueva
‘Minoría’ les ofrece un mísero 2.9%.
Bueno, la verdad es
que esa pedida fue realizada por los cabecillas de las 15 organizaciones sindicales que integran la Mesa del
Sector Público (MSP) –sempiternos funcionarios
a sueldo de sus respectivas agrupaciones-, coordinadas por la nada democrática
y representativa CUT. Todo éste lote, con mucha pompa, fue el que entregó al
Ministerio de Hacienda y a la Subsecretaría del Trabajo la "Propuesta de reajuste y mejoramiento de las condiciones laborales, negociación del sector público, centralizado y descentralizado",
a fin que los ministros del Trabajo y de Hacienda, Ximena Rincón y Rodrigo Valdés,
respectivamente, tuviesen la bondad de ponerse la mano en el corazón y en la
billetera para dar cuenta de lo solicitado.
Como no hubo mucha
bola por parte de las insípidas autoridades, los dirigentes convocaron a las descontentas
masas a una paralización nacional –la cual estuvo sazonada con multitudinarias marchas
en las principales ciudades- para el jueves 29 de septiembre, jornada que las
bases coronaron con un gran éxito de participación (adhesión del 90%), agitación y ganas de seguir la pelea por un reajuste que ponga
las cosas al derecho para los trabajadores en éste país.
Pero luego de ese
fogonazo, la MSP y la ignominiosa CUT como que se fueron pa’dentro, sin dar
mayores señales de querer apretar el acelerador de la movilización popular.
Ante ello, surgieron voces críticas y hasta mesas
alternativas al interior de las organizaciones de l@s públic@s, las cuales –se suponía-
irían tomando fuerza y extensión en la medida que los primeros aflojaran o
simplemente le hiciesen el juego al gobierno de la Nueva ‘Minoría’, de cuyos
partidos integrantes muchos de los maleados dirigentes reconocen filas. No
obstante, los sectores rebeldes tampoco han sido capaces de conducir la lucha
sectorial.
En medio de éste cuadro y como si fueran pocas esas debilidades y errores
de las dirigencias, el gobierno lanzó el falso -pero alarmante- notición que los sueldos de los empleados públicos superarían en un 55% al promedio nacional
de los empleados del sector privado. Y es que promedio no es mediana, con lo que
el inmenso billete que se supone ganan l@s públic@s cae a $580.000, lo que es cercano
al promedio nacional y que resulta “modesto para un país como Chile”. Tampoco sueldo
base, así no más, es lo mismo que con el agregado de bonos ocasionales,
competitivos y concursables. Sin duda que éste tipo de aviesas noticias o
montajes logran calar en la ‘opinión pública’ y le permiten a los defensores
del modelo de dominación vigente que la demanda de l@s públicos suene a sinvergüenzura.
La última gestión que supimos de la MSP-CUT, fue que sostuvieron este jueves 6 una “reunión
de carácter técnico” con representantes del gobierno, de la cual no obtuvieron –como
siempre que no hay movilización de por medio- nada en limpio. En la ocasión, el
ejecutivo desglosó la propuesta del pliego de la MSP-CUT y cuánto presupuesto
le saldría al Estado cumplir con los contenidos del petitorio presentado.
La vicepresidenta
nacional ANEF, Nury Benítez, manifestó que la mayoría de las respuestas
efectuadas por el Ejecutivo fueron insuficientes y negativas. "Ayer solo
se costearon algunas propuestas, que no son del reajuste y bonos, sino como los
honorarios y cuánto cuesta el traspaso de los honorarios, el costo del universo
de la cobertura. Se vieron temas como esos", explicó la dirigente.
Como los dirigentes
tienen mucha paciencia, se programó una nueva “reunión de carácter técnico”
para el próximo miércoles 12, a las 18:00, donde por cuarta o quinta vez se
verá el reajuste salarial, los bonos de término de conflicto, de vacaciones,
aguinaldos y otros temas. Lástima que recién entonces, de acuerdo a las
respuestas que les dé el gobierno sobre tales demandas, los astutos líderes se podrían
(en potencial) poner las pilas respecto de la movilización sectorial y de
negociar desde una posición de fuerza.
Al parecer, de la
Puente, Figueroa, Maturana, Gajardo, etc., sufren de una amnesia selectiva y no
recuerdan que la gente de Correos de Chile y del Registro Civil logró una serie
de conquistas gracias a paralizaciones no de uno o dos o tres días, sino que de
semanas y meses.
No es un misterio para nadie que la MSP y la deleznable CUT han jugado en
todos estos años un miserable papel de cara a las negociaciones por el aumento
de las remuneraciones del sector público, entre otras pérfidas movidas a
espaldas de los que dicen representar.
Por todo lo anterior, urge reactivar, desde las bases y los dirigentes más
comprometidos y consecuentes, una movilización más ofensiva y decidida por un reajuste
que responda de verdad a las necesidades de l@s trabajador@s públic@s, a la vez
que avanzar decididamente en pos de la democratización de todas las
organizaciones del sector, donde se han enquistado verdaderas mafias de
parásitos ineficientes, embusteros y farsantes.
¡Ningún Acuerdo o Reforma a Espaldas
de los Pueblos y l@s Trabajador@s!
¡Sólo la Lucha y la Unidad Nos Harán Libres!
Colectivo Acción Directa CAD -Equipo Sindical
Octubre 7 de 2016
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