11
DE SEPTIEMBRE DE 2015:
NADA NI NADIE ESTÁ OLVIDADO-OLVIDADA
Cuando caminamos por las grandes urbes de
Chile podemos sentir en concreto como el capitalismo lleva la delantera en lo
que antiguamente se conocía como lucha de clases.
Millones son los que caminan raudamente
hacia alguna parte como para cumplir con algo, como para hacer algo, delatando
con su rápido movimiento que todo está bien, que todo lo que ocurre es
perfectamente normal. Es como si vivir
en un país que no tiene Educación y Salud gratuitas fuera de lo más normal del
mundo. Como si pagar por cada paso que
se da fuera algo habitual, de toda la vida.
Y suma y siguen los elementos cotidianos que podríamos señalar en esta
crónica y que son los mismo que salen a la conversación cuando se tiene un
momento de tranquilidad, en un carrete familiar o con los amigos, o amigotes.
Qué curioso resulta que en esos momentos de
tranquilidad se relaten situaciones rayanas en la locura con respecto a cómo
opera el capital y su dictadura. Sin
embargo, en los hechos, en el día a día, son millones los que aceptan la
Realidad como si ella fuera lo Racional y que fuera de ella no existe otra
opción.
Podríamos llenar planas y planas con las
diversas situaciones en donde es posible apreciar el rol que la Refundación
Social Capitalista ha hecho su trabajo, generando ya una conducta cotidiana en
donde pareciera que no supiéramos hacer otra cosa que las que hacemos
diariamente.
Y todo partió ese maldito martes 11 de
septiembre de 1973.
Quienes participamos activamente,
promoviéndola y convocándola, en la Marcha desde la Memoria hacia la Victoria,
sentimos que es posible invertir la lógica de la derrota a la que nos someten
los poderosos. Pudimos sentir en
concreto que es posible nadar contra la corriente, que es necesario reventar
toda la “alegría plástica” que entrega el sistema.
Este 11 de septiembre de 2015, si
todavía sientes algo, si todavía te enojas porque sabes que te caga la AFP, la
ISAPRE, que te cagan con el cobro de la luz, el agua, el gas, el teléfono, con
el cobro del colegio, el liceo y la universidad y con todas las prácticas con
que el capitalismo y sus representantes te cagan la vida, sal a la calle a
protestar, únete a tus vecinos y vecinas y expresa tu indignación. Por lo menos, que en ese día sientas que vale
la pena la rebeldía y que si esa rebeldía la mantienes es muy probable que nos
dejen de cagar a todos y a todas.
Fraternalmente,
COLECTIVO ACCIÓN DIRECTA
Septiembre 9 de 2015
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