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viernes, 10 de julio de 2015

¿QUE SIGNIFICA LA SOLIDARIDAD EN LA IZQUIERDA?


Traducción de:
“What Does Solidarity Mean on the Left?”

Por Andre Vltchek*, en Dissident Voice[1]
Publicado julio 7, 2015

Grecia es blanca, es europea, y por lo tanto los ojos de todo el mundo "progresista" occidental ahora se dirigen hacia Atenas: ¿se atreverá el gobierno griego al default[2], a dejar la zona del euro y, finalmente, la Unión Europea? Como si la respuesta a esta pregunta pudiera cambiar el mundo; como si Atenas fuera el lugar donde se decidirá el destino de la humanidad.

A unos 10 mil kilómetros de distancia, Ecuador es predominantemente indígena y, por lo tanto, habitado por ‘no-gente’, pidiendo prestado algo de la colorida terminología de George Orwell. Maltratado por parte de su propia gente, principalmente por las ‘élites’ Euro-céntricas y de piel clara, quienes disfrutan de sus lazos muy estrechos con la UE y los Estados Unidos, el Ecuador y su gobierno decididamente izquierdista puede contar muy poco para la solidaridad internacional, sobre todo dentro de la camaradería del llamado movimiento ‘progresista’ occidental.

Después de todo, es esperable que las personas no-blancas y no-occidentales sufran. Incluso la izquierda de Occidente está ‘acostumbrada’ a su agonía.

Francamente, casi nadie en Europa o en los Estados Unidos quiere que aquellos gobiernos de izquierda en América Latina, en Asia o en África alcancen el éxito. ¡Ese es el "secreto más escondido" o, al menos, ‘una verdad incómoda’!

China, Sudáfrica, Venezuela, Ecuador y otros países del mundo han sido abordados y tratados en la forma más despreciable, paternalista e incluso racista por los denominados individuos y grupos de la izquierda occidental.

La izquierda prácticamente se ha extinguido, tanto en Europa como en Norteamérica. Aun así, no deja de ser penosamente farisaica, auto-indulgente, mandona y arrogante. No gobierna y no inspira a casi nadie, nunca más. Vergonzosamente, se ha convertido en una cobarde y una perezosa. Pero se comporta cual si le asistiera el derecho divino de juzgar y aconsejar a otros: a aquellos que luchan, que inspiran, ¡y a aquellos que gobiernan! Es evidente que lo que ella quiere que los no-occidentales, los gobiernos y movimientos socialistas y comunistas, aquellos que están orgullosamente gobernando por el mundo, ¡se vayan derechito al infierno!

"¡Si nos derrumbamos, que otros colapsen también!", es el silencioso lema.

Ello se debe a que la izquierda en Europa y EE.UU. se construyó sobre un marco intelectual cristiano y euro-céntrico, con el exclusivismo y los sentimientos supremacistas en su núcleo.

Por supuesto, tales cosas nunca se mencionan en París, Londres, Roma o Nueva York, pero hay un perfecto consenso: que sólo los líderes y pensadores occidentales están calificados y podrán, debemos confiar en ello, "salvar el mundo". Y sólo a ellos les está permitido decidir qué país califica para ser llamado socialista o comunista, democrático o tiránico, progresista o reaccionario.

Incapaces de dirigir, y probablemente reacios a gobernar, demasiado aletargados e intelectualmente desgastados, la mayoría de los pensadores ‘progresistas’ occidentales están constantemente rumiando unas lunáticas teorías políticas y económicas que nadie en otras partes del mundo, especialmente en los países pobres, tomaría en serio y mucho menos querrían aplicar. Además, dichos ‘líderes progresistas’ occidentales les exigen niveles ridículos de pureza a los líderes izquierdistas de América Latina y Asia. Al mismo tiempo, les exigen un sacrificio enorme a los pueblos no-occidentales: "Déjennos consumir y vivir la gran vida, ya que pobres, no podemos ayudarlos. Pero les dejamos preocuparse por el medio ambiente y por la vida austera."

*****

Y así, mientras Grecia vota acerca de su futuro financiero, Ecuador se enfrenta a uno de las más despiadadas subversiones de su historia. La está enfrentando en solitario. Tal parece que toda la izquierda no-latinoamericana a la que le importa está ahora en Atenas. Que yo sepa, ¡no hay ‘delegados’ solidarios aterrizando en Quito!

Ecuador ha sido abandonado, no como lo fue Venezuela, hace ya bastante tiempo.

Hace poco fui invitado a hablar en un importante canal de televisión basado en el Irán, para hablar sobre Palestina y Grecia. Me negué. Mi argumento era claro: tanto Palestina como Grecia ya han recibido suficiente solidaridad de ‘nosotros’ en América Latina. Ahora, nuestras revoluciones se enfrentan a grandes amenazas. Están siendo atacadas. ¡Somos seres humanos, también! Además, necesitamos ayuda; necesitamos solidaridad.

En honor a quien merece honor, la editora iraní me puso en espera después de expresar su preocupación por la situación en América Latina. Unos minutos más tarde, volvió a mí a través de Skype: "hablé con nuestro director y me dijo que le entrevistara acerca del Ecuador. Él dijo: ellos son nuestros hermanos. ¡Caemos juntos o sobreviviremos juntos!"

Naturalmente, ¡tales declaraciones y gestos son recordados por el resto de la vida!

Pero eso es Teherán, ¡no Londres o París o Chicago!

*****
Mi prioridad ahora es Ecuador. Mi prioridad es América Latina. Este es el lugar donde veo tomando lugar la gran batalla por el futuro de la humanidad. Aquí y en Asia. Definitivamente, ¡no en Europa!

Los gobiernos de América Latina no son perfectos. El gobierno chino tampoco es perfecto. Pero ellos están haciendo todo lo posible, después de décadas y siglos de pillaje, después que Europa, los Estados Unidos, al unísono con las elites locales y las empresas multinacionales, fueron saqueando y violando todo "al sur de la frontera".

La corrupción no se puede erradicar en un año o en una década. Las importadas corruptelas moral y religiosa fueron conformando toda la "América Latina" (la cual, afortunadamente, es cada vez menos 'Latina' por estos días) por parte de occidentales asesinos y codiciosos, durante generaciones. Las cosas pueden mejorar, en gran medida, en una década o incluso en un año, pero las estructuras del horror construidas durante largos siglos pudieran no ser revertidas completamente. ‘El proceso’ tiene que estar en su lugar por muchos años, sin interrupciones.

Sí, no somos perfectos, pero estamos tratando de mejorar a medida que avanzamos. Nos estamos moviendo, ¡hacia adelante! Estamos intentándolo, avanzando y cayendo, pasando a través del fuego, la suciedad, las conspiraciones e intrigas. Estamos avanzando, ¡maldita sea!

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Las élites ecuatorianas están protestando y saboteando todo lo grande que ha hecho el presidente Rafael Correa y su administración. Muchos piensan que el golpe de Estado está en el aire.

Ni una palabra acerca de los progresos realizados: nuevas autopistas y aeropuertos, hospitales modernos y escuelas, postas médicas, innumerables patios de recreo para los niños, cultura libre, bibliotecas… La derecha en Ecuador es propietaria de la mayoría de los medios de comunicación. No es muy positivo lo que escriben sobre Ecuador los medios alternativos del ‘progresismo’ occidental. La Voz Disidente (Dissident Voice) es una excepción.

No es muy bueno lo escrito sobre China, Vietnam, Eritrea, Sudáfrica, Zimbabue, o Irán. Para los puristas occidentales, todos estos países no son lo suficientemente buenos, ni bastante socialistas, no como se define el socialismo o el comunismo, ¡no como ellos definen la democracia! Los 6 ó 7 mil años de cultura China no significan nada. Todo tiene que ser medido y definido sólo por las normas occidentales.

Rusia es diferente: no es socialista en absoluto (a pesar que adoptó la gran política exterior internacionalista soviética), pero es predominantemente blanca, y entonces obtiene suficiente sostén emocional, ardientes discursos y declaraciones de amor y apoyo.

Muchos camaradas chinos con los que hablé en Beijing, se dieron completamente por vencidos respecto de la izquierda occidental; ellos la ven, principalmente, como la fuerza más reaccionaria (ideológicamente), cuando se trata de países y gobiernos izquierdistas no-blancos. ¡Y yo no podría estar más de acuerdo!

*****

Grecia no debe pagar nada. Esa fortaleza, la fascista Unión Europea, no debe intimidarla.

Pero Grecia debiera luchar por la causa internacionalista, por los ideales universales.

Sin embargo, todos sabemos que por lo que está peleando es sólo por su propio beneficio… o por la supervivencia de su elevado nivel de vida.

Cuando las cosas estaban yendo bien, cuando el dinero fluía, cuando los agricultores de Grecia empezaron a conducir los últimos modelos de automóviles alemanes sobre lustrosas autopistas, el pueblo griego no estaba protestando. Y ellos no estaban preguntando de dónde provenía el dinero. Este procedía, principalmente, del saqueo del mundo no-occidental, de la ‘no-gente’.  Eso estaba muy bien, ¿no es cierto?

Yo estuve en Grecia, recientemente. Hablé con muchas personas, incluidas aquellas de la izquierda, sobre todo de la izquierda. Casi nadie tenía alguna idea de lo que está pasando en América Latina. Nadie se preocupaba. Incluso en Turquía están monitoreando lo que pasa en Caracas o La Paz.

Pero no en Atenas; ¡en Atenas a nadie le importa un pito!

¡Muchos estaban aún quejándose amargamente por la inmigración ilegal desde África! ¿No lo saben aquellos escritores que están escribiendo ahora ensayos muy halagadores, glorificando al pueblo griego, lo saben? ¿O pretenden no ver ni oír?

Grecia está luchando por sus propios objetivos. Sus ingresos se han reducido, de 1.400 a 800 euros al mes, per cápita, en muchos casos. Terrible, pero en muchas de las naciones africanas de donde a menudo proviene el dinero para apoyar a los agricultores griegos (con la UE acabando con la agricultura africana), los ingresos se ubican en torno a 30 euros al mes. He tratado de abordar estas cuestiones en Atenas, pero nos encontramos con caras de piedra y de total perplejidad, incluso de hostilidad. Se me dice: "¡Pero estamos acostumbrados a estándares diferentes!"

Y por lo tanto, repito: lo que está pasando en Grecia no es una revolución internacionalista de izquierda.

Los griegos están luchando por Grecia.

¡América Latina está luchando por la humanidad! Ella nunca ha explotado a nadie. Ha enviado médicos, maestros, a todo el mundo. Envía combustible a los pobres, incluso en los Estados Unidos. Ha suministrados instructores a países desventurados como Timor Oriental. Ha ofrecido solidaridad a Palestina, Irán, ¡y a muchos otros!

*****

Si Ecuador llegar a caer bajo fuego directo, voy a regresar, y me hago responsable de ello, haciendo todo lo posible para apoyarle. ¡Y si la Izquierda Occidental no hiciera nada por ayudar, romperé, completa y categóricamente, todas mis relaciones con ella!

Como muchos han escrito: Grecia va a sobrevivir. "Después de todo, está en Europa". Incluso estando abajo, está, de alguna manera, arriba.

Nosotros, "aquí abajo", no tendremos otra oportunidad. Y si caemos, ¡todo el mundo no-occidental se caerá con nosotros!


* Andre Vltchek es un novelista, cineasta y periodista de investigación. Ha cubierto guerras y conflictos en docenas de países. Su último libro es “Exponiendo las Mentiras del Imperio”. También escribió, con Noam Chomsky, “Sobre el Terrorismo Occidental: Desde Hiroshima a la Guerra Teledirigida”. Su novela político revolucionaria aclamada por la crítica “Punto de No Retorno”, ha sido reeditada y está disponible. “Oceanía” es su libro acerca del imperialismo occidental en el Pacífico Sur. Su provocador libro sobre la Indonesia post-Suharto y el fundamentalismo mercantilista se llama: “El Archipiélago del Miedo”. Completó un documental, “El Gambito Ruandés” (2013), acerca de la historia de Ruanda y el saqueo de la República Democrática del Congo. Después de vivir durante muchos años en América Latina y Oceanía, Vltchek actualmente reside y trabaja en el Este de Asia y en África. Él puede ser contactado a través de su página web. Leer otros artículos por Andre.


Equipo Internacional –CAD CHILE
Julio 10 de 2015



[2] ‘Defecto’ (literal), pero el término se utiliza más para indicar cuando un deudor, casi siempre un gobierno, no puede cumplir con sus obligaciones de pago de la deuda; ergo: ‘Suspensión de pagos’. También, se identifica con el hecho que aquel no cumpla con alguna obligación o cláusula financiera –nota del CAD   

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