Ayer, Provincia De Malleco
Éste domingo 19, desde el mediodía, diversos
enfrentamientos se registraron entre carabineros paramilitarizados y Comuneros Mapuches
en la provincia de Malleco, producto de que alrededor de 60 familias se tomaron
un predio forestal en el sector de Curato, territorio ancestral que reclaman
hace mucho tiempo como propio.
Ante
la brutal y masiva arremetida policial, los ocupantes se tuvieron que defender con
todo lo que tenían a su alcance. El Werken de la comunidad, Sergio Licán, negó[1] que
hubieran utilizado escopetas (como aseguraban los pacos) y que las "60
personas iniciamos el proceso de recuperación de forma totalmente
pacífica" y de hecho, asegura que fue la fuerza pública quien ingresó al
lugar de forma violenta para dispersarlos.
Luego
de talar árboles que les servirán para capear el crudo invierno y reparar sus
casas, los Mapuche se retiraron, no sin antes advertir que seguirán en la pelea
por su demanda territorial.
Hoy,
Puerto de San Vicente
La
mañana de este lunes, un grupo de unos 150 trabajadores realizó una manifestación
en el Puerto de San Vicente, en Talcahuano, obstaculizando con barricadas incendiarias
el acceso a este recinto. Se trata de trabajadores de una compañía extranjera
contratista (mayoritariamente de capitales chinos) que está realizando obras en
el terminal marítimo.
Rodrigo
Gutiérrez, presidente del sindicato de trabajadores contó[2] que
ellos prestan servicios a esa empresa que realiza las ampliaciones y
reparaciones del puerto SVTI y puerto internacional. Agregó el dirigente que el
motivo de la acción surgía luego de llevar 15 días en huelga legal y requieren que
SVTI (dueña del terminal) haga reflexionar a la empresa extranjera acerca de
los derechos laborales de los trabajadores.
En
una reunión pasada, la compañía extranjera habría indicado que la legislación
chilena no aplica para ellos. Asimismo sostenían que las acciones del sindicato
estaban fuera de la normativa vigente, lo que fue desestimado por el tribunal. Gutiérrez
manifestó que la empresa insiste en seguir haciendo uso de su sistema laboral,
en el que no aplican normativas de seguridad. A esto agregó que ellos tienen
una taza de accidentabilidad de cinco trabajadores por semana. Por otro lado,
dice que tampoco se respeta el que sólo el 15% de los trabajadores deben ser
extranjeros, ya que serían 50% chilenos y 50% extranjeros.
Los
carabineros de Fuerzas Especiales estaban con la luma lista para atacar, pero
menos mal que SVTI no las llamo para el desalojo, dejando los trabajadores el
cerco a media mañana.
Hoy, a
las Afueras de la Ex Colonia Dignidad
Una
vez más[3] y a
pesar de la lluvia, las Agrupaciones de Familiares de Detenidos/Desaparecidos
de Talca, Linares y Parral llegaron hasta la entrada principal de la ex Colonia
Dignidad, hoy autodenominada Villa Baviera, para manifestar su protesta frente
al polémico turismo que desarrollan los colonos.
En
dicho lugar los participantes en la movilización procedieron a instalar lienzos[4] e
imágenes de personas cuyo último rastro se pierde en Colonia Dignidad en una
muestra que denominaron la “Exposición del Horror”.
Posteriormente
instalaron en el frontis de la entrada una bandera nazi para recordar que
varios de los Jerarcas del grupo inicial liderado por Paul Schaffer eran ex
combatientes del régimen nazi, los que impusieron en Dignidad una cultura cuasi
militar, fabricaron, comercializaron y escondieron armas y desarrollaron
actividades de Inteligencia al punto de acumular 46 mil fichas de chilenos. En
estas fichas figura al menos al menos un centenar de personas que hoy figuran
como Detenidos/Desaparecidos.
Myrna
Troncoso, presidenta de la Agrupación de Talca leyó una declaración en la cual
denunciaba que “en esta puerta fue entregado el estudiante Alvaro Vallejos al
guardaespaldas de Schaffer, Gerard Mucke, hoy condenado por este crimen. Por
este asesinato fue nuevamente condenada la cúpula de la DINA. Y cientos de
otros chilenos de Concepción, Talca y Santiago eran entregados en este lugar
para ser sometidos a torturas y muchos de ellos asesinados al margen de toda
ley”, afirmó.
Al
menos durante una hora los manifestantes expresaron su indignación por la
existencia de un complejo turístico en un lugar que catalogan como “centro de
exterminio y torturas”.
Se
debe recordar que en un reciente fallo el juez Jorge Zepeda condenó[5] a una
veintena de colonos por “asociación ilícita” para cometer crímenes, así como a
la cúpula de la DINA. En el mismo fallo y de manera inédita, el juez condenó al
Estado de Chile a levantar un Memorial en el lugar para recordar a las
víctimas.
Sobre
este tema Myrna Troncoso aplaudió el fallo, pero recordó que la demanda de los
familiares es que “toda la Colonia se convierta en un Parque por la Paz y los
Derechos Humanos”.
Después
de manifestarse pacíficamente en la puerta del enclave los manifestantes se
dirigieron al monolito erigido al lado del río Perquilauquén, donde cantaron y
dejaron flores. El último gesto de esta manifestación fue arrojar claveles
rojos al río en recuerdo de quienes -según declaraciones judiciales de Mucke[6]– fueron
exhumados, quemados con fosforo químico y luego arrojados al río que atraviesa
Colonia Dignidad. Este Operativo ordenado por la dictadura en 1978 se ejecutó
en todo Chile para ocultar los restos de los Detenidos asesinados y fue
denominada Operación “Retiro de Televisores”.
¡QUE LA HISTORIA NOS ACLARE EL PENSAMIENTO!
¡SÓLO LA LUCHA NOS HARA LIBRES!
¡WEUWAIÑ!
Colectivo Acción Directa 8a – Chile
Julio 20 de 2015
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