Hasta las 00:00, hora
de Chile, 03:00 de Francia, unas 150 personas han resultadas muertas en París a
causa de ataques terroristas de autores desconocidos, aunque seguramente
ligados al infierno en el Medio Oriente ampliado (Noticia en desarrollo)
Más de 150 muertos es el saldo de, al menos,
7 ataques terroristas simultáneos perpetrados la noche de éste viernes 13 por grupos
de desconocidos en diversos lugares de la capital de Francia. Así como frente a
la bárbara acción del 7 de enero pasado, cuando
supuestos terroristas muslimes las emprendieran a tiros contra del equipo de la
revista satírica francesa Charlie Hebdo,
con saldo de 12 personas muertas, a esta hora se despliegan miles de policías y
militares en París y sus alrededores.
La
noche se hizo más obscura en la ciudad Luz: varias explosiones cerca del
Estadio Nacional de Francia, tiroteos en un restaurante cerca del Louvre y en
un centro comercial, y una toma de rehenes en una sala de conciertos.
Los
primeros reportes sobre el bestial raid dicen relación con un tiroteo, a las 21:23 GMT. Lo habrían perpetrado dos
hombres no identificados armados con rifles kaláshnikov en el restaurante Le
Carillon, en el norte de París. De acuerdo con los informes, el atentado ha
dejado al menos 11 muertos y siete heridos.
Pocos
minutos después del anterior, se reportó otro ataque con tres explosiones cerca del Estadio de
Francia, donde se disputaba un partido de fútbol amistoso entre la selección local
y la alemana, dos de las cuales, según los informes, han sido provocadas por
terroristas suicidas. El presidente François Hollande, quien estaba
presente en el evento deportivo, fue rápidamente evacuado del estadio, con
dirección al Ministerio de Interior. Desde aquí, Hollande, ordenó el
estado de urgencia en todo el territorio nacional y evocó un acto genéricamente
terrorista, al referirse a las explosiones y tiroteos ocurridos hoy en esta
capital.
Hasta
la hora, se sabe que habría 5 terroristas muertos por la policía; 4 integrantes
de esta última fueron abatidos en la toma de la sala de conciertos Bataclan; solo
en este lugar, la cifra de los rehenes asesinados por los terroristas que se
apropiaron del lugar superaría los 120.
Los
ataques coincidieron con el inicio esté día del restablecimiento de los
controles en las fronteras francesas, debido a la cumbre mundial sobre cambio
climático que tendrá lugar en esta capital del 30 de noviembre al 11 de
diciembre próximo. De hecho, varias delegaciones debieran arribar durante la
próxima semana, y a ellas se sumarían luego varios presidentes y jefes de
Estado.
Este
monstruoso atentado de tipo terrorista, sin duda, viene a hacerle el juego a la
derecha internacional y local, al imperialismo y a los grupos delincuenciales
tipo Emirato Islámico –EI- (ISIS en inglés) y al-Qaeda. Y afirmamos esto, pues sus
autores buscan que Francia se inhiba de combatir a dichos grupos en Siria, Irak
y Afganistán, aun siendo muy tórpido el rol jugado por los galos en estos
combates, ya que, en lo atingente a la intervención en Siria, Francia forma parte
de la coalición de EE.UU. que interviene allí sin coordinación con Damasco ni
con el aval de la ONU.
Definitivamente,
se quiere obligar a los galos a que continúen
apoyando por la puerta trasera la intervención mercenaria e imperial en Siria,
apoyando a los que combaten al legítimo gobierno de Bashar al-Asad,
Pero,
si hasta la líder del ultraderechista Frente Nacional (FN) francés, Marine Le
Pen, denunció
el pasado mes de octubre que las incursiones militares de su país en Siria
favorecen a los terroristas, enfatizando en que París apoya a terroristas que
operan en el país árabe, incluyendo el Frente Al-Nusra, afiliado a Al-Qaeda. O
sea, la derechista tiene razón, más lo que dice lo hace de la boca para afuera
y de cierto que ahora la veremos afirmar que se debe eliminar todo rastro musulmán
de suelo francés y terminará cediendo al chantaje de los actuales atentados
terroristas, los cuales pretenden que no se combata en ninguna forma al terrorismo
lumpenesco y seudo-religioso de EI y cía.
Ahora,
de todas maneras, el gobierno francés debe dejar de lado su cínico tratamiento
del terrorismo prohijado por EE.UU. y la OTAN. Sus servicios de seguridad
deberán dar cuenta de todo lo que sabían los días previos a estos atentados.
Por ejemplo, cuál fue el tratamiento dado por la tenebrosa Dirección General de
Seguridad Interior (DGSI), encargada de la lucha –supuestamente- antiterrorista,
al caso de la detención, el pasado 29 de octubre, de "un
individuo que planeaba una acción violenta contra militares de la marina
nacional de Toulon", según los dichos del ministro de interior Bernard
Cazaneuve.
Cazaneuve
reveló, a principios de éste mes, que la DGSI llevaba un año vigilando al
detenido por su "radicalización", que le había conducido a expresar
públicamente su apoyo a "las tesis yihadistas". Lo arrestaron en la localidad sureña de Toulon (a unos 840
km al sur de la capital francesa y próxima al puerto de Marsella) cuando
intentaba conseguir "material" para "pasar a la acción".
Francia,
el pueblo francés, debe exigir una investigación veraz y amplia de los fatídicos
golpes de esté viernes triste, no como la vez pasada, para los hechos relacionados
con el caso Charlie Hebdo, en que no
se esclareció el fondo del asunto. El Partido ‘Socialista’, hoy en el ejecutivo,
debe dejar de jugar al imperialismo en ultramar, pretendiendo que nada le puede
suceder a su población. El gobierno de Hollande debe cesar su apoyo a la
política del garrote en el Medio Oriente y el norte de África proclamada por EEUU,
la OTAN y sus socios, realizando esfuerzos sinceros por suspender el apoyo,
directo o indirecto, a los grupos terroristas que asolan el Medio Oriente y el
norte africano. El Estado galo nunca más debe repetir, por sí o apoyando a
otros, invasiones militares como las acometidas en contra de Libia, Irak, Malí
y otras más, actividades que junto con el apoyo a los terroristas y lumpen
seudo musulmán sólo terminan exponiendo a su inocente población a hechos tan
terribles como los de éste viernes 13.
Equipo Internacional – CAD CHILE
Noviembre 13 de 2015
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