
REUNIÓN EXTRAORDINARIA DE CONFECH EN CONCEPCIÓN, 30/08/14
“Hoy
vemos que la reforma [del gobierno] no ataca los pilares fundamentales, sobre
todo del mercado en educación”,
Takuri Tapia, presidente FEUSACH
Este sábado 30 de
agosto, en una reunión extraordinaria de la mesa directiva de la CONFECH, realizada
en la Facultad de Educación de la histórica Universidad de Concepción, por una
amplia mayoría de 20 votos, 19 abstenciones y ninguno en contra, se decidió descartar
la participación de los universitarios en el “plan de participación ciudadana”
o mesa de diálogo con el MINEDUC. Ello abre vastas posibilidades para que se retome
e incremente la movilización social en contra de la mentirosa y gatopardista
reforma educacional que, a toda costa, nos pretende imponer el gobierno de la
Nueva Mayoría (NM).
En la ocasión y luego de una semana de
amplia y democrática discusión al interior de las asambleas en cada casa de
estudio, en las cuales se decidió oponerse al señuelo gobiernista, se pudo
revertir el adverso 15-16 del CONFECH extraordinario del sábado pasado, el que
relativizó las posibilidades de los sectores estudiantiles más jugados y
consecuentes, pasando a conformarse ahora un amplio bloque opositor a las maniobras
de Eyzaguirre y la NM.
Quien no crea que la NM es capaz de
intrigar de manera gansteril, sólo tiene que saber que el 15 a 16 del sábado 23
estuvo mediado por la intervención del ministerio del interior (MINT) y el PPD,
los cuales captaron la trascendencia que significaría un voto estudiantil hostil
a los designios en lo educacional de los grupos mantenedores y administradores
del sistema, que hoy nuevamente ocupan el gobierno. El MINT, por su lado, encabezado
por Rodrigo Peñailillo y secundado por Flavio Candía (PPD a cargo del área de
Unidad de Análisis Estratégico de ese ministerio), pagó el traslado y
alojamiento de los representantes universitarios de sus filas, lo que redundó
en que asistiese un récord histórico de 42 federaciones al encuentro. Con todo,
la votación favoreció el diálogo con el gobierno por sólo un voto, en momentos
en que estaba muy afectada la imagen de este al haberse opuesto la mayoría de
las bases del Colegio de Profesores a su propuesta de agenda corta, dejando de
paso sin piso al mentecato de Gajardo.