El embajador de
Siria en Moscú confirma que aviación estadounidense fue la que atacó
El embajador de Siria en Moscú, Riad
Haddad, acusó éste lunes 15 a la aviación estadounidense de haber
"destruido" un hospital de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la región
de Idleb, rechazando las acusaciones de Washington contra el régimen sirio.
"Realmente,
la aviación estadounidense lo ha destruido. La aviación rusa no tiene nada que
ver en todo esto, las informaciones reunidas lo dicen claramente", aseguró
Haddad en una entrevista concedida a la cadena de televisión pública rusa
Rossiya 24, difundida el mismo lunes por la noche.
Según
el diplomático sirio, las acusaciones de Estados Unidos son "una
manifestación de la guerra de información que comenzó desde los primeros días
del conflicto en Siria".
La
ONU afirmó el lunes que disparos de misiles "mataron cerca de 50 civiles,
entre ellos niños, y causaron numerosos heridos" en "al menos"
cinco centros médicos y dos escuelas en Alepo y Idleb (norte de Siria). Además,
se informó que un misil impactó en un hospital
de niños en la localidad de Azaz. Diez personas murieron en el ataque y más
de treinta resultaron heridas.
El
secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que denunció "violaciones
flagrantes del derecho internacional internacional", no atribuyó la
responsabilidad de los lanzamientos de misiles.
Varios
medios reportan que “Una oenegé siria, sin embargo, había estimado antes de que
los ataques aéreos fueron ‘probablemente rusos’". Pero aclaremos que esa
misteriosa ‘oenegé’ es el Observatorio
Sirio de los DDHH, entidad anti-siria meramente mediática, que se encuentra
a cargo de una sola persona, Abdul Rahman, declaradamente enemigo del régimen
de Bashar al-Assad y que se asentó hace más de una década en Inglaterra. El New
York Times ha revelado que la operación contra-propagandística de Abdul
Rahman en realidad está financiada por la Unión Europea y el gobierno inglés. No
se podría imaginar una fuente más voluble, comprometida y parcial en cuanto a
la información, pero a pesar de todo durante los últimos dos años su
“Observatorio” ha sido la única fuente de información del interminable torrente
de propaganda emanado de los medios occidentales. Posiblemente lo peor de todo
sea que las Naciones Unidas utilizan esa fuente de propaganda comprometida como
base de sus diversos informes.
Adelantándose
a los hechos, EE.UU.
denunció estos bombardeos. En un comunicado cínico y virulento, el
departamento de Estado condenó "la brutalidad del régimen de Assad" y
pone "en duda la voluntad y/o la capacidad de Rusia a ayudar a
detenerlo". En tanto, el perro faldero de la actual Roma imperial y
miembro de la OTAN, Turquía, como si estuviese muy necesitado de fuerzas para
atacar a Siria y a los Kurdos, recibió la ayuda de Arabia Saudí y aviones de
combate de ésta se desplegaron en una base aérea turca, reiterando los saudíes su
ofrecimiento de enviar grupos de soldados a Siria para, supuestamente, ‘combatir
al autodenominado Emirato Islámico’ (ISIS). Mientras tanto alrededor de 40.000
refugiados que huyen de la violencia se instalaron en campamentos a lo largo de
la frontera turca en Siria.
Equipo Internacional – CAD Chile
Febrero 16 de 2016
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