El designado obispo de la diócesis de
Osorno, Juan Barros Madrid, "hizo todo el trabajo sucio de Fernando
Karadima" y se encuentra acusado de amenazas a seminaristas, encubrimiento
de abusos sexuales y ruptura del secreto de confesión
Al cumplirse un año de la desgraciada
imposición de Juan Barros como obispo de la diócesis, al mediodía del viernes
1º una caravana de laicos de Osorno partió desde la catedral San Mateo y llegó
este domingo 3 al templo valdiviano, buscando llamar la atención de la prelatura
eclesiástica acerca de la infausta situación que afecta a la diócesis osornina.
La
nueva medida de protesta fue protagonizada por la Agrupación de Laicos de
Osorno. Los feligreses levantan como principal reclamo la salida del obispo
Juan Barros de la diócesis, debido a las múltiples y fehacientes denuncias
sobre su relación con el delincuente Karadima, a quien encubrió.
La
caminata pasó por San Pablo el mismo viernes 1º, por Paillaco éste sábado 2,
para llegar a participar de la misa dominical en la ciudad de Valdivia, capital
de las Región de Los Ríos. En ésta, junto con buscar apoyo a su demanda, los aproximadamente
setenta católicos peregrinos manifestaron públicamente sus razones para
rechazar al sacerdote.
Ya
en la catedral valdiviana, los manifestantes fueron recibidos por Carlos Martínez,
Párroco del recinto religioso quien dijo comprender las aprehensiones de los
marchantes con el obispo Barros, calificando como interesante la forma de la
movilización. Con aplausos al hacer ingreso a la catedral Valdiviana se marcó
la culminación de ésta manifestación de la cual aseguran que no será la última
si no existe pronunciamiento de la conferencia episcopal –que comienza éste
lunes 4 en Punta de Tralca-, adelantando que podrían realizar una marcha que se
extendería incluso hacia la región metropolitana.
"Estamos
contentos pero a la vez muy cansados", comentó antes de llegar a Valdivia Juan
Carlos Claret, uno de los líderes del movimiento. Los fieles católicos
estuvieron acompañados por sacerdotes como Peter Kliegel y Américo Vidal, según
indicó el vocero, quienes han marchado bajo el lema "Misericordia para
Osorno".
"Es
un obispo encubridor, un obispo ausente que no cumple su misión pastoral,
porque nunca se le ve y porque cuando anuncia que oficiará una misa, son pocos
los que van", acusó Claret. Aseguraron que seguirán insistiendo en su
reclamo.
Por
otra parte, el mismo vocero del movimiento señaló
que si bien con esta cruzada se espera que en la nueva asamblea de la
Conferencia Episcopal se trate el tema de Osorno y una posible solución a la
permanencia del cuestionado Barros, también indicó que se busca el despertar de
los todos los laic@s para que su parecer sobre las decisiones de la jerarquía
católica sea tomada en cuenta.
Reiteramos
nuestro apoyo a la comunidad osornina, en términos de repudiar esta imposición
obscena de un cura que carece de toda moral y en quien no anida el espíritu de
un verdadero cristiano. Por cierto, se debe insistir en la realización de movilizaciones
de las comunidades de base, de laic@s y de religios@s, como las llevadas hasta
ahora, a fin de hacer público el malestar y el hastío por la injusta medida.
Barros, si es que tuviese algo de decencia, debiera renunciar de inmediato a la
espuria designación y a la iglesia.
¡QUE LA HISTORIA NOS ACLARE EL PENSAMIENTO!
Colectivo Acción Directa 8a – Chile
Abril 3 de 2016
No hay comentarios :
Publicar un comentario