- Carlos Lavín a Hugo Bravo, dueño y gerente
de Penta
Buena batahola se armó en la UDI cuando su nunca bien
ponderada ex candidata presidencial 2013 Evelyn Matthei, última carta luego del
fiasco de Golborne y de la depre de Longueira, declaró que no era muy adecuado
para el partido derechista seguir con el lastre del turbio y delincuencial
Jovino Novoa; era tiempo de pegarle la patada. Además, había que expulsar al
tiro al ‘choclo’ Délano, integrante del clan y uno de los dueños de la empresa
defraudadora Penta.
"Novoa se
tiene que ir del partido", señaló y agregó, muy enfáticamente, que[1]
"La UDI, todos los partidos, creo que el Gobierno, creo que todo Chile
tenemos que enfrentar nuestra vergüenza. Estamos todos en una vergüenza
terrible y aquí va a haber que reconstruir todo. Va a haber que reconstruir la
UDI, va a haber que reconstruir todos los partidos".
Y como es
pitonisa, aseguró que “Estamos recién empezando, creo que la crisis se va a ir
agravando en los próximos días, van a empezar a salir muchos más nombres de todos
los lados".
En efecto, la
crisis existe hace rato en la UDI y en menor medida en RN. En la primera, la
semana pasada no más renunciaron a su directiva Ernesto Silva y el ‘raspado de
olla’ Moreira[2].
La cosa es proporcionalmente no tan notoria en la Nueva Mayoría, pero igual
existe y se agravará al saberse de las ramificaciones de los pagos electoreros efectuados
por SQM a discreción. Se nota que Ponce Lerou (el ex yerno del ladrón y asesino
Pinochet) había superado la etapa prehistórica de la prácticas políticas
actuales y había llegado a comprender la necesidad de contar con un bloque político
de Estado en forma y amplio, parapeto necesario para descomprimir la presión de
la demanda social y evitar que un movimiento social unitario cuestione las
bases del sistema de dominación. Seguramente le ayudó en ello el ideólogo del
lado obscuro de la fuerza Enrique Correa, ex Mapu y hoy un renovado PS, a cargo
de la empresa asesora y de lobby Imaginacción[3].
Claro que no lo asesoró del todo bien[4],
digámoslo.
Pero volvamos a
nuestra arquetípica Evelyn. Antes de decir nada sobre enfrentar la vergüenza,
ésta política buena para la chuchá[5]
y enemiga de la trisomía humana[6],
podría empezar por reconocer la propia (que nunca lo ha hecho), acerca del
pasado de su propio padre, el retirado director de la Fuerza Aérea e integrante
de la fatídica junta militar Fernando Matthei, quien estuvo a cargo de la
Academia de Guerra Aérea (AGA) luego del Golpe de 1973 -al menos desde enero de
1974- y que nunca se ha hecho responsable por las torturas y las muertes de los
que allí estuvieron apresados, incluido otro ex oficial de la FACH y padre de
la actual presidenta: nos referimos a Alberto Bachelet[7].
También fue torturado en la AGA el ex coronel Carlos Ominami y otros conocidos
de su propio padre, a manos de ex colegas y subordinados.
Bueno, como
fuere, sus llamados y arrepentimientos a medias no conmovieron a la directiva de
la UDI, aunque por allí deslizase una crítica comprensible a sus correligionarios
metidos en las platas Penta y que no quieren renunciar. Fue el presidente
interino de la camorra derechista, Javier Macaya (a cargo del quilombo luego de
la salida sin gloria de Ernesto Silva), quien salió al paso de los dichos
señalando de manera enfática que “no comparto las opiniones” de la ex candidata
presidencial[8].
El diputadillo llegó a asegurar que “son opiniones a título personal, la Evelyn
es la Evelyn. Hemos dicho que existen diferencias y en un partido como la UDI
pueden existir discrepancias, pero estamos en la línea de conducción que apunta
a la presunción de inocencia y esperamos aclarar esta situación en los
tribunales de justicia”.
Y en esa línea
medio dicharachera, fue que el Javi largo el doblado: “no me voy hacer cómplice
de una cuestión que está en el ambiente hoy, de que se vayan todos. No quiero
ser parte de esa operación”. “No creo que se vayan todos, y sobre todo en un
momento donde el caso Penta va a marcar un antes y un después, no creo que el
financiamiento a la política vaya a ser igual. Creo que las sanciones serán
durísimas, pérdida del cargo, de aquí en adelante el financiamiento va a ser
transparente”, añadió.
No sabemos si
Macaya es oligofrénico o el muy cochinón cree que nosotros lo somos. Bueno, puede
que sea un poco de ambas cosas. Y decimos esto por lo siguiente:
1.- Alegar
presunción de inocencia para los integrantes del binomio delictual UDI-Penta, a
estas alturas, es una soberana estupidez[9];
2.- El muy
infeliz no puede caer en cuenta que basta con que se vayan los más emporcados y
reconocidamente truchos de la UDI y, entonces, muchos por allí le empezarían a
creer y no faltarían quienes les prendieran velas;
3.- Mientras
politicastros como la Evelyn, la von Baer[10],
Moreira, Golborne, Longueira, de Mussy, Lavín, Kast y un largo etcétera persistan
en mantenerse activos en la política, aunque ya no muestren sus bellacas y
sonrientes facies por ahí, no podrá ser cierto que el financiamiento politiquero
pueda tener algún atisbo de transparencia.
Advirtamos, eso
sí, que el horno en estos días da para todo tipo de bollos. Como el estrato
político-civil se tambalea por la crisis institucional y ha perdido gravemente el
sentido de la realidad, el miércoles 18 fue electa[11]
presidenta de la comisión de DDHH del senado la cuestionada Jacqueline van
Rysselberghe. Ésta aberración sarcástica es fruto de los cuoteos entre los
componentes del duopolio establecido en la esfera política[12],
quienes pueden cometer estos y otros extravíos más, sin siquiera llegar a pestañear.
La crisis por ‘arriba’,
que ya se está institucionalizando, ha podido seguir un decurso relativamente inercial.
No se ha logrado levantar un gran movimiento social contestatario y
cuestionador de la extendida corrupción del estrato político-civil y del
empresariado ligado al capital financiero. No existen, como en Brasil y
Argentina, cientos de miles de personas reclamando en las calles que ya está
bueno de robo, coima, sobornos, etc., todos ellos cancelados con cargo al
pueblo trabajador. En esa tarea organizativa y política debemos invertir grandes
esfuerzos, desde las bases y al interior de las organizaciones populares.
¡SÓLO LA LUCHA Y LA UNIDAD NOS HARÁN
LIBRES!
COLECTIVO ACCIÓN
DIRECTA – CHILE
Marzo 20 de 2015
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