El pasado
jueves 15 de septiembre se realizó un paro en el principal centro público de
salud del país, por cuanto los trabajadores –liderados por la FENATS Base- están
protestando contra la externalización de funciones anunciada por
la dirección del establecimiento de salud público
El anunciado paro de
la FENATS en el Hospital Clínico Regional de Concepción –HCRC- tuvo que ver con
la existencia y operación de fundaciones con fines de lucro, en acuerdo con la
dirección del hospital, para contratar personal que desplazará a los/as
funcionarios/as hoy en funciones. El alcance mayor de la movilización se logró
en aquellos servicios en que operará con mayor fuerza la anunciada externalización:
pabellón, lavandería y esterilización.
De hecho, la fecha elegida para el paro
tuvo que ver con una actividad de festejo anunciada por la dirección del
centro, en que esta pretendía desplegar un gran show para desviar la atención
de l@s funcionari@s respecto de los alcances de lo que tiene planificado,
jarana que no pudo llevar a cabo ante la oposición de la mayoría de est@s.
Es la plana mayor del HCRC la que ha enrarecido
el aire y las relaciones laborales al interior del establecimiento, obligando a
tomar estas y otras medidas de fuerza. Así lo anunció el presidente de la FENATS
Base, Jorge Figueroa Zapata, quien acusó
precarización del empleo, indicando que una gran parte de l@s trabajador@s del hospital
pasaran a una fundación.
Además, la FENATS ha denunciado que dicho
traspaso a ciertas fundaciones implicará la triangulación de sueldos de
trabajadores a honorarios, algo que aseguran “es sólo la punta del iceberg” y que
por cierto les motiva a paralizar las actividades. Como “una nueva forma de
esclavitud y precarización laboral” calificaron los dirigentes sindicales del
hospital penquista el contrato de trabajadores vía fundación.
Según explicó Jorge Figueroa, a través de
una institución intermedia, que corresponde a una fundación, se subcontrata a
funcionarios, pagándoles el mínimo, cuando se les entregan más de 600 mil pesos
por persona para estos efectos.
“No entendemos por qué el hospital no paga
directamente al trabajador, o por Código del Trabajo o una figura distinta. No
entendemos esto de seguir haciendo negociados dentro de un establecimiento
público con el sector privado”, expresó Figueroa.
En la misma línea, el presidente de la
Asociación de Enfermeros, Gabriel Meza, lamentó que a lo menos 6 de sus
asociados estén siendo obligados a subcontratarse por una Fundación, lo que va
contra el espíritu de los acuerdos entre los gremios y el Ministerio de Salud.
Consultado el director del Hospital
Regional, Sergio Opazo, intentó ponerle paños fríos a las legítimas denuncias de l@s
funcionari@s, asegurando que se trata de una “licitación para tres funcionarios”
(o sea, no tendría que ver con los enfermeros) a través de instituciones
externas, entre las que no está considerada la fundación del propio hospital,
como se había deslizado en un principio. El directivo insistió en que por la
acotada glosa de honorarios no puede sostener a estas personas y se abrió la
posibilidad de mantenerlos a través de estas empresas externas, con las mismas
condiciones que hoy tienen, a honorarios; es decir, la dirección se abre a la
precarización de lo precario.
El mismo Opazo (que parece que no labora en
el establecimiento, pues no sabe qué está pasando), dice que no entiende el
revuelo que están causando sus medidas y anuncios, porque “la fórmula se
utiliza desde hace años para contratar personal para el cumplimiento de metas”.
Y a renglón seguido, larga que son –al menos- 5 las instituciones con la que
tiene contactos para los efectos de externalizar a personas y funciones.
Es claro, las huelgas de hambre, los paros y las movilizaciones proseguirán y escalarán
en las próximas semanas, ello ante la nula transparencia por parte de la
dirección del HCRC en el proceso de externalización que pretende desarrollar
contra viento y marea y por negarse a un diálogo real con la FENATS.
Colectivo Acción Directa 8a –
Chile
Septiembre 19 de 2016
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