DECLARACION PÚBLICA
¿HACIA DÓNDE VA CODELCO?
Ante el anunciado comienzo de un amplio proceso de despidos masivos y de precarización de las condiciones de contratación, la Federación de Sindicatos de Profesionales y Supervisores de CODELCO (FESUC) hace pública la síntesis de la opinión construida en su Asamblea Nacional, realizada en Santiago el 19 y 20 de Mayo.
1. El país y el mundo han sido testigos de los millonarios recursos que CODELCO entrega año a año al Estado de Chile. Sólo los últimos 7 años estos superan los 40 mil millones de dólares, los que son posibles gracias a la condición de CODELCO como empresa 100% de propiedad chilena. Dichos aportes son el fruto de la labor de trabajadoras y trabajadores, de diversas profesiones y oficios quienes con un alto sentido de pertenencia y compromiso entregamos nuestro conocimiento y experiencia en beneficio de nuestra patria.
2. Por cada tonelada de cobre que produce CODELCO el país recibe el doble de ingresos que los que obtiene por esa misma tonelada producida por una empresa minera privada. ¿Qué es más eficiente para Chile?
3. Para que este excelente negocio para Chile siga siendo posible, necesita de planes de desarrollo e inversión de largo plazo con fuentes claras, expeditas y transparentes de financiamiento, que incluyan la capitalización de parte de las utilidades generadas. Estas últimas han sido sistemáticamente negadas por los últimos gobiernos, obligando a nuestra empresa a recurrir a la venta de patrimonio nacional a su cargo, asociaciones con intereses privados, endeudamiento externo y contratos de futuros. Dichas estrategias de “desarrollo empresarial” han ido de la mano de rebaja de las condiciones laborales a través de la externalización de funciones, la contratación y subcontratación precaria de mano de obra y la intensificación de las jornadas de trabajo.
4. Las decisiones adoptadas por las Administraciones superiores de CODELCO bajo los últimos gobiernos han permitido seguir aportando cuantiosos recursos al Estado, pero la ausencia de un plan de desarrollo de largo plazo debidamente financiado ha estancado a la empresa, deterioriado notablemente su condición competitiva y reduciendo su participación relativa en la producción de cobre. Al mismo tiempo, la subcontratación precaria ha sido y sigue siendo causa de importantes conflictos sociales, y malos negocios como las ventas “a futuro” han arrojado millonarias pérdidas. Dichas decisiones de orden superior han estado ajenas a la influencia de los estamentos laborales permanentes que formamos esta gran empresa, y no podemos ser quienes terminemos pagando por las malas decisiones de ejecutivos nombrados por transitorias administraciones de turno.
5. Nos llama la atención la contradicción que existe entre exigirle a CODELCO mayor eficiencia para entregar aún más excedentes al país, y al mismo tiempo negarle los recursos que le permitan hacer las inversiones para que Chile pueda seguir recibiendo sus excedentes. Simplemente no es factible lo uno sin lo otro, en especial si se descuida la actividad exploratoria de un país que tiene el 30% de las reservas de cobre del mundo.
6. Concientes y comprometidos con la búsqueda de mayores niveles de competitividad y de una renovación generacional, las organizaciones sindicales de CODELCO negociamos y concordamos con la Administración planes de retiro voluntario que tuvieron como resultado la salida de la empresa de más de 2 mil trabajadores en los últimos meses. Con esta reducción de más de un 10% de la dotación total propia suponíamos cerrados los procesos masivos de desvinculación de personal. Sin embargo, producto de la reorganización del distrito norte se han abierto nuevos procesos de desvinculación masiva que ha comenzado con 90 profesionales y que podría alcanzar sólo este año a más de mil trabajadores de diversas áreas y roles; siendo los más afectados quienes laboran en las actividades terminales agrupadas bajo la denominación administrativa de “División Chuquicamata”.
7. Al mismo tiempo, la contratación de los y las nuevas profesionales se está realizando en condiciones precarizadas, que inlcuyen sólo los mínimos legales y no consideran ni las remuneraciones ni los beneficios laborales y sociales logrados en decenas de negociaciones colectivas, deteriorando con ello el nivel de vida alcanzado por los trabajadores de la gran minería del cobre. Estos estándares debieran ser el referente para el trabajador chileno, bajo la premisa de “nivelar hacia arriba”. La política de precarización de la contratación “nivela hacia abajo”, y afecta principalmente a mujeres y jóvenes que hacen su vida en regiones mineras en que la vida tiene altos costos y penurias ambientales y sociales.
8. La forma en que se está realizando el proceso de desvinculaciones masivas y de contrataciones en condiciones precarias ha dañado profundamente el clima laboral, la motivación y el involucramiento de todo el estamento laboral. Ha existido un trato carente de respeto a la trayectoria, al desempeño, a la experiencia aportada, al conocimiento generado, y a hombres y mujeres que han hecho crecer a nuestra empresa. Esto ha ocurrido, paradójicamente, al mismo tiempo en que esta Administración promueve una “Carta de Valores” en que declara la importancia de la dignidad y del respeto a las personas.
9. Al mismo tiempo, nos preocupa la falta de consideración por el respeto a los derechos fundamentales de quienes laboramos en CODELCO, pese a la doctrina laboral que promueven organismos laborales nacionales e internacionales al respecto.
10. Es inevitable vincular este tipo de iniciativas a otras como la externalización de funciones y el anunciado fin de la Ley Reservada del Cobre; las que en conjunto jugarían a favor de los intereses de quienes buscan la privatización de CODELCO.
11. El actual estilo de administración está incubando conflictos cuyos efectos y límites son imprevisibles. Por ello es que manifestamos nuestra activa disposición a un diálogo amplio, verdadero, transparente y respetuoso, con el fin de alcanzar los acuerdos que permitan construir un clima laboral que facilite un planificado y sólido desarrollo de nuestra empresa, en que se valore debidamente el aporte y la dignidad de las personas.
12. Por lo tanto, le hacemos llamado a la Administración de CODELCO para que se abra a la constitución de espacios de diálogo verdadero que permitan alcanzar acuerdos y compromisos de largo plazo acerca de la construcción conjunta del futuro de CODELCO, velando por el bien superior de Chile. Este diálogo debiera realizarse en un marco de valores compartidos, en que se expongan con claridad los planes que la actual Administración tiene para nuestra empresa, y en que se consideren los intereses de todos los actores involucrados.
13. Finalmente, a la clase política y al mundo social los llamamos a iniciar un diálogo amplio acerca de la forma en que queremos desarrollar la gran minería en nuestro país, de sus industrias asociadas, las fuentes de financiamiento, el destino de sus excedentes, el rol del Estado, de los intereses privados, de sus trabajadores y trabajadores, y de las comunidades que habitan en las regiones mineras.
Sin miedo, ejerciendo nuestros derechos
Federación de Sindicatos de Supervisores y Profesionales de CODELCO (FESUC)
Una Fuerza para Chile
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