LA MENTADA EDUCACIÓN SOCIO-EMOCIONAL O ¿SE LE SIGUE HACIENDO LA PEGA AL ESTADO DEL CAPITAL?
“Un niño puede enseñar tres cosas a un adulto:
a ponerse contento sin motivo, a estar siempre ocupado con algo y a saber
exigir con todas sus fuerzas aquello que desea” -Aníbal Ponce
La ya famosa frase “todo cambia,
para que todo siga igual” de Giuseppe Tomasi di Lampedusa
(1896-1957), que es conocida en la práctica política como el gatopardismo, se
puede aplicar a todo el proceso o coyuntura que se desarrolla en Chile desde
1990 hasta el minuto. Se puede expresar
incluso como: "Si queremos que todo siga como está, es necesario
que todo cambie". Bien lo
sabe Chile Vamos, la ex concertación hoy nueva mayoría y el frente amplio, que
hacen el trabajo que el bloque en el poder les señala.
Es ya un mito
instalado que estamos en “democracia”, cuando de lo que se trata es del
despliegue de toda la institucionalidad heredada de la dictadura militar del
capital monopólico-financiero.
Por otra
parte, y bien lo sabemos, es la Educación uno de los ámbitos que mejor
resguarda el sistema de dominación capitalista.
Es un pilar fundamental para mantener la hegemonía, el consenso. No olvidemos que la última ley que firmó la
junta fue la LOCE.
Desde 1990
arranca la “Reforma Educacional” en donde firman el acuerdo el mineduc y el
Colegio de Profesores. Desde ese minuto
a la fecha el balance general es que “todo ha cambiado en Educación, para que
todo siga igual”.
El aparato
escolar ha sido funcional al modelo económico y a su patrón de
acumulación. Chile desde 1984 se ha
convertido en una gran bodega y volvió a poner en práctica el crecimiento
económico en base a lo primario exportador con énfasis en las ventajas
comparativas.
Desde 1990 el
aparato escolar ha sufrido modificaciones sustanciales, ninguna de las cuales
fue consultada a quienes trabajan directamente en ese espacio o al conjunto de
la sociedad.
A comienzos de
los ’90 se intentó aplicar, por ejemplo, el constructivismo, que fue un fracaso
apenas comenzó su aplicación. Luego, en
1997 con la jornada escolar completa (JEC) se buscó consolidar el rol de “guardería”
de los colegios y liceos para que los padres pudiesen trabajar las largas horas
laborales que exigían cada vez más horas extras. Recordemos que la JEC establecía media
jornada de clases a la antigua y en la tarde talleres de “libre elección” que
jamás se implementaron.
Ahora, el
mineduc, con el respaldo de la UNESCO, sale con la panacea de la “EDUCACIÓN
SOCIO-EMOCIONAL” que vendría, según sus epígonos, a solucionar todos los conflictos
existentes en Chile. Es la nueva pomada
que viene desde arriba. Ya miles de
colegios y liceos prometen ser “los pioneros en educación socio-emocional”.
Como siempre,
a ningún actor directo del proceso de aprendizaje se le consultó al respecto.
Sigue primando
la “medición de la calidad de la Educación”, como si fuera posible “medir” la
calidad de la Educación. El SIMCE, la
PSU, son los parámetros que aplastan todo proceso diverso, que inhibe una
Educación integral.
Sin embargo,
no es sólo la existencia del SIMCE y de la PSU, o de los cambios en los
paradigmas educativos, lo que mantiene una Educación chata, inicua, repetitiva,
sinsentido, que no cautiva a los Estudiantes: Desde 1990 a la fecha, jamás se
ha escuchado al Colegio de Profesores cuestionar, por ejemplo, los famosos “contenidos
mínimos obligatorios”. No se ha escuchado
jamás al Colegio de Profesores opinar siquiera sobre las formas, metodologías y
fines de la Educación. No ha luchado por
establecer un 50% de horas lectivas y un 50% para poder planificar las
clases. Jamás se ha pronunciado sobre la
necesidad imperiosa de que la Educación sea un instrumento de transformación,
de Liberación Humana y Social, un vehículo para la Revolución necesaria.
Mucho se
esperaba de la actual dirección del Colegio de Profesores, pero en los hechos
es la repetición de lo que fue la conducción reformista del PC, que sirvió como
canal de comunicación, de validación, de las políticas estatales ya proyectadas
desde 1990.
Se requiere de
Profesores y Profesoras que no sólo estén dispuestos a dar lo mejor de sí en la
sala de clases, se requiere de Profesores y Profesoras que no sólo estén
dispuestos al “apostolado”, sino que se necesita de Profesores y Profesoras que
sean críticos a lo que están haciendo, de lo contrario se convierten en
cómplices de la producción y reproducción de la dominación.
Existen tareas
específicas que se deben realizar de inmediato: Suprimir las Unidades Técnico
Pedagógicas (las odiadas UTP, que sólo realizan un rol de represión en el
aparato escolar) y volver a los Departamentos por área. Definir el rol del inspector general como un
facilitador del proceso educativo y no como un jerarca todopoderoso, que
también controla y fiscaliza al docente.
Pero, por
sobre todo, es hora de que los Profesores y Profesoras comiencen a preguntarse
qué tipo de Educación quieren para cumplir con el hermoso ejercicio de Educar.
Es ostensible
que el Profesor y Profesora como Trabajadores y Trabajadoras que son, luchen
por la defensa de los niveles de vida.
Sin embargo, de ellos y ellas se exige algo más: "Exponer a
los oprimidos la verdad sobre la situación es abrirles el camino de la
revolución".
COLECTIVO ACCIÓN DIRECTA
Diciembre
24 de 2018
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