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martes, 31 de diciembre de 2013

COLECTIVO ACCIÓN DIRECTA CAD: SE VA UN REGULAR AÑO PARA EL PUEBLO Y SE VIENE UN 2014 DE LUCHA.



SE VA UN REGULAR AÑO PARA EL PUEBLO Y SE VIENE UN 2014 DE LUCHA
“El futuro está oculto detrás de los hombres que lo hacen”
Anatole France

A LOS PUEBLOS, LOS TRABAJADORES, LOS POBLADORES Y LOS ESTUDIANTES. AL CONJUNTO DE LOS EXPLOTADOS Y EXCLUIDOS DE CHILE.

COMPAÑEROS Y COMPAÑERAS:

Seguramente, a estas alturas del año que se va, tod@s los que bregan en pro de la emancipación social en nuestra formación estarán haciendo los pertinentes recuentos y balances de lo obrado por cada uno en el período, solos y/o en conjunto con otras fuerzas amigas. No hemos sido la excepción y también procedimos a analizar nuestra intervención en 2013, a intentar echar luces sobre las coyunturas de corto y mediano alcance desarrolladas a lo largo de él y, sobre todo, a evaluar y dar perspectivas al tímido aunque interesante proceso de unidad que está germinando entre tod@s aquell@s que luchan.
Sin duda, fue éste un año irregular en lo político para el Movimiento Popular (MP) chileno. Durante el primer semestre el liderazgo lo llevaron, por tercer año consecutivo, los estudiantes y de entre estos, sobre todo, los secundarios. Sin embargo, agreguemos que éste movimiento estudiantil sufre un deterioro progresivo, evidenciado en una baja cuantitativa desde 2012 y en que, hasta hoy, no logra conformar una dirección unitaria y ampliamente reconocida entre los movilizados de los distintos niveles educativos, esto último a despecho que la mayoría de las federaciones hayan sido ampliamente conquistadas por la ‘Nueva Izquierda’ y de los empeños de la ACES por liderar a los secundarios. Un hito interesante ocurrió a mediados de año, poco antes del período de vacaciones invernales, cuando pasaron también a compartir la avanzada del MP varios sectores de trabajadores.
De estos últimos, fueron notorias y heroicas las movilizaciones llevadas a cabo por los pescadores artesanales, los portuarios, por diversos gremios de funcionarios públicos, los forestales, el movimiento No + AFP, etc. Nos atrevemos a afirmar que, desde el segundo semestre, los explotados se sacudieron la modorra de varios años y comenzaron a dar los primeros pasos tras una unidad y movilización superiores. Claro que para catalizar dicho proceso, será fundamental que los revolucionarios intenten ganar la conducción de las diversas instancias de dirección del movimiento sindical, así como profundizar la politización de las demandas inmediatas que los mueven en primera instancia. Una cantera donde queda mucho por hacer es el Movimiento No + AFP, que aún corre por un carril independiente de la CUT, pero al que los frentes sindicales de la Nueva ‘Fechoría’ ya han echado el ojo.              
En todo 2013, además, vivimos la continuidad de las luchas de los deudores habitacionales, de los dependientes de los programas de emergencia, de los pobladores de localidades marginadas, de la diversidad sexual, a la par de las peleas que varias comunidades dieron por el derecho a un medio ambiente libre de contaminación. Todos ellos son la base del nuevo y rebelde tejido social, sobre el cual se podrán asentar asambleas populares locales, para, en un mediano plazo, unificarlas al nivel provincial o regional.           
El Pueblo-Nación Mapuche, poco a poco, ha ido desplegando una amplia y efectiva lucha de resistencia y liberación, la que se irá incrementando con el transcurrir de los próximos meses. El Estado-nación burgués ha reaccionado con una cruenta represión, apoyo material a los latifundistas y a las forestales, con juzgamientos ilegales y chapuceros de los presos políticos mapuche y con una inmensa campaña de desinformación respecto de sus embates en el Wallmapu. Así, es fundamental el apoyo político, social e informativo que todos l@s que luchan demos a ese pueblo en pie de guerra.
Creemos importante destacar, asimismo, las movilizaciones llevadas a cabo por el pueblo y los revolucionarios y que estos ya han hecho suyas. Ellas se iniciaron en la VIII región, con motivo de los 3 años de no-reconstrucción luego del 27F; la Protesta Nacional Popular del 11 de marzo, por primera vez con repercusiones en 5 regiones; un nueva y movida celebración del Día del Joven Combatiente; la Marcha del Agua, el 22 de abril, en el marco del Día de la Tierra; marchas y actos por el 1º de Mayo, que lograron romper con lo oficiado por la domesticada CUT, en las 3 principales ciudades del país; acciones populares en contra de la cuenta presidencial del 21 de mayo; una inmensa movilización nacional en defensa de la Educación Pública, el 26 de junio (también natalicio de Allende); diversas actividades populares en torno al 11 de julio, Día de la Dignidad Nacional, que éste año tuvo, por vez primera, apoyo de la CUT y de algunos sectores de la Concertación, claro que con fines de amañar la movilización; octubre abrió, el 5, con una gran movilización nacional en contra de las AFP; cerraron el año las movilizaciones de los empleados públicos tras un reajuste digno, haciendo fuerza en el marco de una negociación con el gobierno en que sus dirigentes gremiales nuevamente no dieron el ancho, pues estos desconfían de sus bases y sólo se dedicaron a presionar pero con el freno a fondo.
Nos parece que la coyuntura más importante de 2013, desde la óptica popular, fue la conmemoración y las movilizaciones por los 40 años del golpe de Estado. Sirvió ella, tácticamente, de marco para el despliegue de múltiples acciones y actividades populares; para destacar el ejemplo, la valentía y la consecuencia de tant@s luchador@s del pueblo; para acusar la impunidad de la que aún gozan los criminales civiles y militares de la dictadura, etc. Estratégicamente, dicha coyuntura puso de relevancia la profunda injusticia social impuesta por el actual modelo de explotación y dominación, con una clara y contundente muestra de los muchos derechos que hemos perdido como pueblo y como trabajadores. En suma, el conmemorar éste especial 11 de septiembre, nos sirvió para mostrarnos cuánto hemos avanzado y cuánto retrocedido en estas cuatro décadas.
Para nosotros, así como para más del 60% del electorado, no fueron tema las elecciones de noviembre-diciembre, si bien expresamos en su momento nuestras simpatías por las candidaturas de R. Miranda y M. Claude, pues estás contaban con raíces en el campo popular y sus propuestas iban en la línea de lo que el pueblo y los trabajadores reclaman hace rato. No obstante, deseamos que las temáticas de lo electoral, la Asamblea Constituyente, así como la dicotomía de lo social/político no empañen el camino de unidad que renació con fuerza este 2013 y que promete seguir con brío en 2014. Nos parece una excelente noticia que hayan surgido Asambleas Populares y federativas en Santiago (APUS), Gran Concepción (APP), en Talca y en Valparaíso, instancias que debemos cuidar, fortalecer y hacerlas avanzar en la senda de la unidad y lucha superiores.
 

¡SALUDOS FRATERNALES AL FINALIZAR 2013 Y MUCHA FUERZA Y ÁNIMO PARA ENFRENTAR EL AÑO QUE SE INICIA!


COLECTIVO ACCIÓN DIRECTA –CHILE
Diciembre 27 de 2013

ASAMBLEA POPULAR POR LA UNIDAD SOCIAL APUS: LA UNIDAD DEL CONJUNTO DE LA IZQUIERDA ANTICAPITALISTA HASTA HACERLA COSTUMBRE.



A LAS QUE LUCHAN.  A LOS QUE LUCHAN.  AL CONJUNTO DE LOS EXPLOTADOS.

        La ASAMBLEA POPULAR POR LA UNIDAD SOCIAL APUS, se suma a los diversos saludos personales y colectivos de este fin de año 2013.  De inmediato señalar que nos encontramos muy lejos de nuestro 1905 o nuestro 1917, todavía no encontramos nuestro Smolny -aunque podríamos citar tantas otras fechas y lugares de procesos victoriosos de quienes luchan por superar el sistema de dominación capitalista-.  No son pocos quienes quedaron obnubilados con lo que fue el 2011, que ya se ve como un proceso lejano, como un trueno en medio de un cielo sereno.  A dos años de ese ya mitológico 2011, se pueden evaluar muchos elementos que permitieron ese punto de inflexión, donde no es posible dejar de mencionar los altos grados de endeudamiento y sobreendeudamiento de aquellos que deben pagar los aranceles y matrículas de liceos y planteles de educación superior, así como el rol jugado por la ex concertación en esos “movimientos sociales” y el papel asumido por aquellos que definieron que la mejor estrategia era arrodillarse ante el grupo mantenedor del sistema opresor del conjunto de la patronal.
        No entraremos en largos análisis, pues eso, como siempre, será tarea a nivel personal o de la Organización.  No entraremos a dirimir si es el camino electoral o la abstención o el voto nulo o no participar de ese espacio, lo  que nos puede permitir avanzar.  No diremos nada acerca de si es la Asamblea Constituyente –o Asamblea Popular Constituyente y Social- o rechazando ese camino, lo que nos permitirá obtener la necesaria Unidad de quienes luchan.  Sí diremos que es hora de derribar todos los Mitos paralizantes y unir a quienes votan y no votan desde el Campo Popular, de unir a quienes luchan por la Asamblea Constituyente y quienes la descartan, siempre desde el Campo Popular.  Para la APUS, es una de las tantas fórmulas que pueden permitir al conjunto de la Izquierda anticapitalista comenzar a incidir de verdad en el escenario político nacional.
        Desde ya proponemos, por ejemplo, realizar un Primero de Mayo realmente alternativo, el cual debiese prepararse desde ya en conjunto entre sindicalistas, pobladores, cesantes, estudiantes, organizaciones políticas-sociales-culturales, etc., es decir, dando el espacio a la Unidad en la Diversidad sin anteponer falsas dicotomías que sólo estimulan la fragmentación y la mantención de trabajos parcelados.  Un Primero de Mayo que sea una marcha de Unidad y de Lucha, que permita censar en concreto cuántos somos, con cuántos contamos y no ser parte de la comparsa de centrales que ya definieron su camino al interior de la legalidad patronal.
        Aprovechamos de saludar al Pueblo de Cuba, a sus Dirigentes, a su proceso de Revolución Social, de saludar a Fidel, al Ché, a Camilo, a Raúl.  Como siempre señalar que el mejor Homenaje a la Revolución Cubana es hacer nuestra Revolución.  Es el momento de cortar el hueveo, de dejarse de tantos diagnósticos, de dejar de ir a las reuniones para contar que tal o cual político patronal dijo tal o cual cosa o que el PC es malo-malito-muy malito, que la CUT vale callampa, que los de allá están por los votos, que los de acá están por los fierros, que esos son ultrones, que aquellos son trotskoestalinistas.  Es el instante de definir las Demandas Sociales y Populares por las cuales nos hemos de movilizar y cómo lo haremos, avanzando desde lo simple hacia lo complejo, comprendiendo, una vez más, que apenas nos encontramos en los prolegómenos de la reconstrucción del Movimiento Popular y que debemos volver a los Tiempos de Recabarren, pero situados en nuestro Presente. Es el segundo de generar la fuerza social por los cambios fundamentales desde lo concreto, ahí donde se encuentre, restableciendo las confianzas y por sobre todo trabajando, trabajando siempre, cada día, desde repartir el volante o la prensa popular hasta las acciones mayores.
¡SÓLO LA LUCHA Y LA UNIDAD NOS HARÁN LIBRES!
¡ARRIBA L@S QUE LUCHAN!
¡VOTANDO O NO VOTANDO EL CONJUNTO DE LA PATRONAL NOS SIGUE CAGANDO.  NADIE NOS TRANCARÁ EL PASO EN ESTE PROCESO DE UNIDAD DE QUIENES LUCHAN!
ASAMBLEA POPULAR POR LA UNIDAD SOCIAL  APUS.
DICIEMBRE 31 DE 2013.

jueves, 26 de diciembre de 2013

ESCUELA DE VERANO FORMACIÓN POLÍTICO-SOCIAL: 7-8-9 DE ENERO DE 2014.

ESCUELA DE VERANO. FORMACIÓN POLÍTICA SOCIAL. 7,8 Y 9 DE ENERO DE 2013
26 de diciembre de 2013 a la(s) 0:56
Durante los últimos años se ha abierto en el país un nuevo ciclo en la lucha de clases. Expresado esto en la retoma, por parte de la clase trabajadora y el pueblo, de la iniciativa social y política, principalmente a través de la emergencia y desarrollo de organización y movilización popular en función de la defensa de nuestros intereses como clase o como sectores explotados y dominados por el capitalismo.
Lo anterior, ha generado también significativas expresiones de solidaridad y articulación, reflejándose en una mayor disposición a la protesta y radicalización, sobrepasando por lo general, los canales formales y legales de la movilización tradicional. De igual manera, se han generado novedosos cuestionamientos políticos al patrón de acumulación y al régimen de dominación, emergiendo con más fuerza al interior del movimiento popular, expresiones políticas anticapitalistas que resitúan  el papel y la centralidad de los trabajadores y el pueblo en las transformaciones sociales.

No obstante, estos avances, no se han convertido todavía en un salto significativo y cualitativo en la correlación de fuerzas favorables a los intereses de los trabajadores/as, menos aún, han dado paso a una crisis sistémica en el bloque en el poder, posibilitando una salida revolucionaria.
Estos nuevos procesos, son más bien procesos de acumulación de fuerzas sociales y políticas, de experiencias en las luchas concretas por demandas clasistas y populares, con nuevas solidaridades cada vez más articuladas. La emergencia de estas luchas y prácticas son sin duda, el primer paso y un pilar fundamental para avanzar en nuevos desafíos políticos.

Para poder cualificar, articular y proyectar estas luchas, necesitamos dotarnos, como expresión del movimiento popular, de innumerables y urgentes capacidades, teoría, conocimientos y habilidades, a objeto de transformar y comprender las principales dinámicas y escenarios por las cuales transitará la lucha de clases en el periodo que se abre a propósito de la reconfiguración del Bloque en el Poder, la inclusión completa al lado de los poderosos por parte del PC y la emergencia de un nuevo reformismo.
La inclusión del PC al lado de los poderosos, no es fortuitita y no pasará desapercibida para el movimiento popular, las luchas de los trabajadores y el pueblo, menos aún para el campo de los revolucionarios. Apoyarán el programa de reformas sociales llevadas adelante para reconfigurar las formas de dominación y explotación, en definitiva, se pasaron con todo al lado del enemigo. Esto, se traducirá en un papel de retardo para el campo popular, desinflando iniciativas, bajando luchas y trabajando en función del consenso de clases.

Respecto del nuevo reformismo, que en periodos de movilización coquetea con las intenciones y subjetividades revolucionarias, pero que en coyunturas electorales nos invita a portarnos bien, desviar nuestras luchas y esfuerzos a campañas electorales (ahora a juntar plata para pagar las deudas), también ha logrado arrastrar a segmentos del movimiento popular a los márgenes del régimen de dominación y explotación, capitalizando bajo sus banderas  gran parte de las reivindicaciones y fuerzas movilizadoras que irrumpieron en este nuevo ciclo. Han canjeando la protesta y la movilización por votos y sillones en el Parlamento, otros han llamado a iniciar una larga cabalgata electoral que lleve a la “ciudadanía” a tomar impulsos para ir mejorando las “condiciones de vida”, dejando de la lado y por completo, cualquier intención revolucionaria profunda y clasista.
La derrota sufrida como movimiento popular y campo de los revolucionarios, llevada adelante por la dictadura como también por el bloque en el poder en la transición,  dejó al movimiento popular sin iniciativa y en un largo repliegue, además de atomizado, disperso, sin teoría y programa revolucionario. No obstante, las luchas desarrolladas desde algunos años atrás, han permitido retomar la iniciativa popular. Lo anterior, es un primer paso, el de la pelea, la retoma de la iniciativa popular debe caminar y orientarse en términos de esfuerzos a la articulación clasista y la unidad programática del campo popular y revolucionario. Estos son los saltos cualitativos a los cuales nos tenemos que enfocar y los que tenemos que superar para cambiar la correlación de fuerzas favorables a los intereses es de la clase trabajadora y el pueblo, en la senda de las perspectivas revolucionarias, clasistas y socialistas.

 En base a lo anterior, consideramos importante la formación y la discusión política que alimente la práctica social y del movimiento popular, justamente para debatir en torno a las tareas actuales del campo popular.

Estas son las urgencias del movimiento popular, prepararse para las luchas actuales, articular fuerza y alimentar con protagonismo e ideas el proyecto revolucionario. Por ello, estimamos necesario y convocamos a una jornada de formación político social, una escuela de verano (7, 8 y 9 de enero) que permita enfrentar desde una perspectiva clasista las discusiones respecto de las grandes tendencias del capitalismo, su crisis actual, la reconfiguración del bloque en el poder y las características generales del periodo que se abre.
Desde otra necesidad, la escuela de verano se propone revisar a la luz de la historia de la lucha de clases, la historia del movimiento popular, sus grandes batallas, experiencias organizativas, dinámicas de construcción, concepciones políticas hegemónicas, periodos y ciclos de la lucha de clases, aciertos y derrotas. Lo anterior, con la finalidad de superar las prácticas y concepciones que nos llevaron a las derrotas, a desviar nuestras fuerzas, a la atomización y la falta de perspectiva clasista y revolucionaria.

Por último, una escuela de verano que nos permita discutir en torno a  los desafíos y tareas abiertas para el movimiento popular en esta nueva coyuntura, pero por sobre todo, a los desafíos abiertos para derribarlo y las posibilidades de concreción del socialismo. Las experiencias actuales y las luchas que vienen serán las temáticas articuladoras del debate de este tercer eje de discusión.


La retoma  de la iniciativa popular por parte de la clase trabajadora y el pueblo requiere de la firme voluntad para construir al alero de las luchas, los  instrumentos políticos, las fuerzas necesarias y los contenidos programáticos  para avanzar en perspectivas revolucionarias, clasista y socialista. Necesitamos avanzar en la homogenización política, conceptual e ideológica del movimiento popular para alimentar con teoría revolucionaria las luchas. Lo anterior, permitirá no solo hablar desde un solo punto y concepción, también caminar juntos y establecer importantes síntesis políticas para dinamizar y articular las luchas anticapitalistas dotándolas de orientación clasista y revolucionaria. Este es un importante desafío, la unidad de las luchas y sectores anticapitalistas al interior del movimiento popular. Esperamos también que esta escuela de verano sea útil para avanzar en el camino de la unidad de los comunistas, de los revolucionarios, en función de la construcción de las fuerzas necesarias para llevar a delante la lucha en contra del capitalismo y quienes lo sustenten.

En definitiva, invitamos a formarnos para la lucha, a colaborar con ideas en el debate fraterno y necesario entre revolucionarios para  alimentar, esclarecer, imaginar y construir  las fuerzas, organizaciones, alternativa y proyecto necesario que requiere la clase trabajadora y el pueblo para poner fin al capitalismo. 


Santiago, diciembre 2013.


Inscripción e informaciones a: 
escuelapoliticaformacion@gmail.com



Convocan:

Colectivo la Savia.
Escuelas Populares.
Revista Iniciativa Popular. 
Juventud Guevarista
Construyendo UTEM
Colectivo La Kiltro Pedagógico
Pueblo en Lucha.
SOMOS USACH
Corriente Político Sindical.

MAP.

lunes, 23 de diciembre de 2013

PRIMERAS JORNADAS DE DEBATE POPULAR: 10-11 ENERO DE 2014. ¡POR LA UNIDAD DE LA IZQUIERDA ANTICAPITALISTA!


El Domingo 22 de diciembre de 2013 23:08, Sebastián Zarricueta Cabieses <sebastianzc@gmail.com> escribió:
Santiago, 10 y 11 de enero 2014
1ras Jornadas de Debate Popular
Desafíos y perspectivas de la construcción político-social en el nuevo período político.

El nuevo período político abierto en Chile y que hoy parece plasmarse en una remozada alianza destinada a administrar las debilidades de la institucionalidad política, obliga a las franjas anticapitalistas a impulsar el debate sobre las posibilidades de convergencia en torno a un proyecto emancipador. Las obliga porque un objetivo obvio de dicha alianza será disipar el ímpetu de las luchas sociales y domesticar su espíritu independiente, así como aislar a las franjas más rupturistas. Unificar voluntades, talentos y fuerzas para las luchas que se avecinan, son un imperativo para las organizaciones populares y de trabajadores que se empeñan en construir una alternativa al modo de vida capitalista.

Los centros de estudios e investigación convocantes, coordinando esfuerzos y recursos, han decidido contribuir a este imperativo llamando a inaugurar las Primeras Jornadas de Debate Popular, destinadas este año al debate sobre los Desafíos y perspectivas de la construcción político-social en el nuevo período político.

Invitamos a las organizaciones político-sociales y a los militantes de las diferentes iniciativas de construcción popular y de trabajadores, a participar activa y fraternalmente en los diferentes debates y presentaciones. La política del Pueblo debe ser elaborada por el propio Pueblo y expresar así sus intereses y capacidades. Hay que abrir y multiplicar espacios que recuperen la política y el poder para los trabajadores y sectores populares. Estas Jornadas pretenden contribuir a dicha recuperación necesaria y urgente.

Grupo de Estudios Marxistas, GEM.
Estudios Nueva Economía, ENE.
Grupo de Estudios Ciencias Sociales y Política, ECSyP.
Plataforma Nexos.

viernes, 20 de diciembre de 2013

COMPAÑERA NALVIA ROSA MENA ALVARADO: ¡PRESENTE! A 40 AÑOS NADA NI NADIE ESTÁ OLVIDADO.

NALVIA ROSA MENA ALVARADO: ¡PRESENTE! A 40 AÑOS NADA NI NADIE ESTÁ OLVIDADO.
            Nalvia Rosa Mena Alvarado, casada, un hijo, embarazada de tres meses, dueña de casa, militante de las Juventudes Comunistas; su cónyuge Luis Emilio Recabarren González, técnico gráfico, ex dirigente sindical; su cuñado Manuel Guillermo Recabarren González, casado, dos hijos, gásfiter; ambos militantes del Partido Comunista y su suegro Manuel Segundo Recabarren Rojas, casado, seis hijos, jubilado, ex dirigente sindical gráfico, militante del Partido Comunista, fueron detenidos por la DINA, entre el 29 y el 30 de abril de 1976. El día 29 de abril, alrededor de las 21:30 horas, Nalvia Rosa Mena fue detenida -en compañía de su esposo Luis Emilio Recabarren González, del hijo de ambos, Luis Emilio Recabarren Mena, de dos años y medio de edad y de su cuñado Manuel Guillermo Recabarren González- por agentes de la DINA en un operativo montado en el sector de Sebastopol con Santa Rosa.
            Ese día, aproximadamente a las 19.30 horas, Nalvia Rosa junto a su hijo, fue hasta el lugar de trabajo de su esposo, ubicado en calle Nataniel N° 47 para, en compañía de éste y de su cuñado Manuel Guillermo, dirigirse desde ahí hasta su hogar, cosa que hicieron alrededor de las 21:00 horas; sin embargo, no llegaron a su destino.
            El único que llegó, hasta las proximidades del domicilio, fue el pequeño Luis Emilio, quien fue abandonado alrededor de las 23:30 hrs. en el lugar, por un sujeto alto y corpulento que se movilizaba en un taxi.
            Por averiguaciones posteriores e informaciones de vecinos que fueron testigos presenciales de la aprehensión, se supo que Nalvia Rosa -con tres meses de gravidez- había sido golpeada en el vientre con la culata de una metralleta, a pesar de sus gritos y súplicas y, en estado inconsciente, introducida en uno de los vehículos en que se movilizaban los agentes.
            Al día siguiente, Manuel Segundo Recabarren Rojas, padre de los Recabarren González, salió de casa muy temprano, siendo detenido a las 07:10, en los momentos en que se disponía a abordar un bus con el propósito de iniciar gestiones tendientes a ubicar a sus familiares que habían sido detenidos la noche anterior. Desde ahí, Manuel Segundo Recabarren Rojas fue trasladado por sus captores hasta el cuartel denominado Villa Grimaldi, recinto de detención clandestino de la DINA, donde pudo ser visto por otros detenidos. Algunos de ellos, que recobraron su libertad, declararon ante la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación, haberle perdido el rastro en agosto de 1976. Se consignó en el informe de esa Comisión que, desde esa fecha, de ninguno de los cuatro detenidos se ha vuelto a tener noticias.
            Cabe señalar que, a pesar que el Gobierno militar negó la detención de los afectados, constan declaraciones del 14 y 17 de julio de 1976 de la División Nacional de Comunicación Social, (DINACOS), a través de las cuales dio a conocer que tras operativos realizados por los servicios de seguridad se había logrado desbaratar treinta y dos casas-buzones del Partido Comunista, que servían de enlace entre la Dirección Nacional de dicho partido y sus Comités Regionales; además de la detención de militantes de dicha colectividad, se agregaba que no se podían entregar más antecedentes a fin de no entorpecer las investigaciones que se realizaban.
            Otro antecedente probatorio de la acción de organismos de seguridad en la desaparición de los afectados, apareció en la edición del 12 de agosto de 1976 del semanario "Qué Pasa", en el que en un artículo bajo el título "Del MIR al PC" se señala que habían sido detenidos militantes y dirigentes del Partido Comunista, tras operativos realizados por los organismos de seguridad. Incluso, se entregaban nombres de algunos de los detenidos.
GESTIONES JUDICIALES Y/O ADMINISTRATIVAS
            El 30 de abril de 1976 se interpuso un recurso de amparo ante la Corte de Apelaciones de Santiago en favor de Luis Emilio Recabarren González, Nalvia Rosa Mena Alvarado, Manuel Guillermo Recabarren González y de Manuel Segundo Recabarren Rojas, el que fue rolado con el N°352-76. Durante la tramitación de éste -y sólo 20 días después de ser presentado- el General de División y Ministro del Interior, Raúl Benavides Escobar, ofició informando que ninguno de los amparados se encontraba detenido por orden de esa Secretaría de Estado, agregando que la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) no registraba en sus kardexs antecedentes relativos a las víctimas, (20 de mayo de 1976). El 26 de mayo del mismo año, el Ministro Benavides reiteró dicha información. El 1° de junio de 1976, y sin otras diligencias, la Corte rechazó el amparo. La Corte Suprema confirmó la resolución el 7 de junio de 1976 ordenando a la Corte de Apelaciones que dispusiera la remisión de los antecedentes al Tribunal del Crimen correspondiente.
            Así, se instruyó, en el 2° Juzgado del Crimen de San Miguel la causa rol N°109.195, el 24 de junio de 1976, la que fue acumulada al proceso rol N°20.027-9 originado en una denuncia por secuestro que había presentado la familia de los afectados, el 18 de junio de 1976, ante el mismo Tribunal.
            El 26 de agosto de 1976, el General de División y Ministro del Interior, Raúl Benavides Escobar, informó que ninguno de los afectados se encontraba detenido por orden de dicho organismo. Ante una orden judicial, Investigaciones señaló haber concurrido a la Cárcel de Santiago, Penitenciaría y Casa Correccional, sin obtener resultados positivos. Asimismo, dijo que en los listados de la Secretaría Nacional de Detenidos (SENDET) no aparecían registradas las víctimas (30 de julio de 1977). Después de que se tomaron declaraciones a familiares, sin otras diligencias, el 30 de septiembre de 1977, se cerró el sumario y se sobreseyó temporalmente la causa porque, no obstante aparecer"comprobado" con los antecedentes de autos la existencia del delito de secuestro denunciado de Nalvia Rosa Mena Alvarado, Luis Emilio Recabarren González, Manuel Guillermo Recabarren González y Manuel Segundo Recabarren Rojas, no existen indicios suficientes para acusar como autor, cómplice o encubridor del mismo a determinadas personas". El 17 de noviembre de 1977, la Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la resolución consultada.
            El 7 de diciembre de 1977, Ernestina Elena Alvarado Rivas -madre de Nalvia Rosa Mena- interpuso una querella en contra de Nelson Rivas, funcionario civil del Ministerio de Defensa Nacional, por su calidad de encubridor del delito de secuestro perpetrado en las personas de sus familiares. En la presentación relató las circunstancias que rodearon las detenciones de ellos y agregó que en julio de 1976 había dirigido una carta al General Rolando Garay Cifuentes con el objeto de que éste, en su calidad de Jefe Militar de la Plaza de Santiago, le informara sobre el paradero de los afectados. En los primeros días de agosto, señalaba Ernestina Alvarado, concurrió al Departamento Confidencial del Ministerio de Defensa (6° piso) para inquirir sobre el resultado de la investigación solicitada al General Garay. Allí la atendió un funcionario de civil que le dijo llamarse Nelson Rivas, y quien -en una segunda visita- le comunicó que la investigación tocaba a su fin y que sus familiares se encontraban vivos y ubicados. A fines de agosto de 1976, la testigo volvió a encontrarse, por tercera vez, con Nelson Rivas, quien desmintió lo expresado en la reunión anterior. Ante la insistencia de Ernestina Alvarado, Nelson Rivas respondió "¿Le he entregado algo por escrito? Yo debo cuidar mi pellejo". El Tribunal dio lugar a la querella, reabriendo el proceso rol 20.027-9 el mismo 7 de diciembre de 1977.
            Dos días más tarde, el 9 de diciembre, el Juez impartió una orden de investigar, la que fue respondida el 9 de febrero de 1978. Sin embargo, el 7 de marzo de 1978, se debió dar una nueva orden puesto que el Tribunal verificó que la investigación anterior "no se extendió en absoluto a la persona de Nelson Rivas", sindicado como encubridor del delito de secuestro. El 19 de abril del mismo año, Investigaciones informó que "en relación al funcionario Nelson Rivas, no hay ninguno de ese nombre en el Departamento (Confidencial), ni lo ha habido anteriormente". Se agregaba que en el Departamento del Personal del Ministerio de Defensa "no se obtuvieron informaciones en relación a Nelson Rivas, por desconocerse el apellido materno y el grado que pudiera haber tenido".
            El 28 de abril de 1978, se cerró el sumario y se sobreseyó total y definitivamente la causa en virtud del Decreto Ley de Amnistía 2.191, dictado el 19 de abril de ese mismo año. El dictamen del Fiscal señaló que "acreditado el delito de secuestro investigado en estos autos y no habiéndose hasta ahora reunido antecedentes para acusar como autor, cómplice o encubridor del mismo a determinada persona, este Ministerio es de parecer de dejar sin efecto la resolución que se consulta en cuanto sobresee definitivamente la causa, y ordenar se prosiga la investigación con el objetivo señalado o, en subsidio, se sobresea temporalmente la causa". El 21 de junio de 1978, la Corte de Apelaciones de Santiago dispuso que el sobreseimiento debía tener el carácter de temporal. Se apeló de la resolución y el 4 de octubre de 1978, la Corte de Apelaciones de Santiago ordenó la reapertura del sumario indicando la necesidad de individualizar al funcionario Nelson Rivas y su citación a comparecer ante el Tribunal.
            Frente a las consultas realizadas por el Tribunal, el Coronel Julio Bravo Valdés, Subsecretario de Guerra, informó, el 8 de noviembre de 1978, que Nelson Rivas no figuraba en los registros de personal del "Organismo que funciona en el 6° piso de este Ministerio". En octubre de 1979 -y después que se realizaran distintas diligencias en orden a ubicar a Nelson Rivas- el Tribunal se constituyó en el Gabinete de Identificación de Santiago, constatando que existía un total de 49 personas que respondían a dicho nombre. Se anexaron entonces al proceso las fichas dactiloscópicas de esas personas y sus respectivas fotografías. Simultáneamente se expedían Oficios tendientes a individualizar al ya mencionado Nelson Rivas. Respecto a él, el Ministro del Interior Subrogante, Enrique Montero Marx, informó el 4 de febrero de 1981, que la Superioridad de la Central Nacional de Informaciones (C.N.I.) había expresado carecer de antecedentes. El 19 de febrero del mismo año, el Coronel Rigoberto Majmud Gallardo, Jefe del Estado Mayor Subrogante de la Comandancia General de la Guarnición de Ejército de Santiago, ofició diciendo que en su Repartición "no ha existido ni existe funcionario de nombre Nelson Rivas". Por su parte, el Teniente General y Ministro de Defensa Nacional Washington Carrasco Fernández, ante una consulta tendiente a identificar al Jefe de Departamento que funcionaba en el 6° piso de dicha Secretaría de Estado en agosto de 1976, comunicó que era "imposible acceder a lo solicitado" por cuanto la documentación sobre materias de personal había sido destruida por disposiciones internas puesto "que no se cuenta con el espacio suficiente para su archivo".
            El 3 de noviembre de 1982, compareció ante el Tribunal Ernestina Alvarado, la que ratificó todas sus declaraciones anteriores y expuso que ninguna de las fotos que se le exhibieron correspondía al Nelson Rivas que trabajaba en el 6° piso del Ministerio de Defensa. Agregó que, posteriormente, fue atendida en dicho lugar por el Coronel Cruz quien le dijo que efectivamente allí no había ningún Nelson Rivas y que "posiblemente se trataba de alguna persona que estaba con chapa". En un escrito de marzo de 1983, Ernestina Díaz señaló que también se habían entrevistado con el Coronel Cruz, Ana González González -madre de los hermanos Recabarren González y cónyuge de Manuel Recabarren Rojas- y Viviana Díaz Caro, hija del actualmente detenido desaparecido Víctor Díaz López. Al respecto, Ernestina Alvarado solicitó que se individualizara al Coronel Cruz y que se citara a declarar al General Rolando Garay Cifuentes. En relación a estas solicitudes, el Vicealmirante Patricio Carvajal Prado, Ministro de Defensa Nacional, ofició diciendo que en esa Secretaría de Estado no se desempeñaba ningún Oficial Superior de apellido Cruz (29 de septiembre de 1983) y que el Mayor General Rolando Garay se encontraba en retiro, desempeñándose como Embajador de Chile en la República de Egipto. (12 de septiembre de 1983).
            Viviana Díaz Caro declaró ante el Tribunal el 21 de junio de 1984 exponiendo que efectivamente en el mes de enero de 1979 había acudido al Ministerio de Defensa, junto a la señora Ana González González, con el objeto de pedir autorización para realizar un acto en el Teatro Caupolicán relativo a los detenidos desaparecidos. Para ello, debieron subir al 6° piso de dicha Secretaría de Estado, en donde las atendió un Coronel de Ejército de apellido Cruz. Fue entonces cuando la señora González le preguntó si conocía a Nelson Rivas, a lo que el Oficial respondió positivamente, ofreciendo incluso llamarlo. Sin embargo, cuando llegó a la oficina una persona, el Coronel Cruz le preguntó si él era Nelson Rivas, quien contestó que su nombre era Nelson pero que su apellido no era Rivas. Entonces el Coronel Cruz les manifestó que se había confundido y que allí no trabajaba ningún Nelson Rivas. Por su parte, la señora Ana González agregó que el Coronel Cruz le había dado "su palabra de Militar" de que allí trabajaba Nelson Rivas. Posteriormente se logró identificar al Coronel Cruz como a Marcelo Moren Brito, funcionario de la DINA.
            En virtud de estos últimos antecedentes, el Tribunal solicitó el Extracto de Filiación y Antecedentes de Marcelo Luis Manuel Moren Brito, Rut 3.392.364-3, el que compareció al Tribunal el 27 de junio de 1985. Dio a conocer su curriculum al interior del Ejército, diciendo que había sido llamado a retiro en mayo de 1985 y que había estado asignado a la DINA desde fines de 1973 y hasta 1977, permaneciendo en Villa Grimaldi y en el Cuartel General. Agregó que en 1979 trabajaba en el 6° piso del Ministerio de Defensa, en la Comandancia en Jefe del Ejército y que él era la persona que informaba al General Enrique Morel Donoso sobre "los supuestos desaparecidos". Explicó que en esa época el General Rolando Garay se desempeñaba como Intendente de Santiago y que éste le pedía al General Morel la información relacionada con los "presuntos desaparecidos". Su rol -señaló Moren Brito- era hacer las consultas a Investigaciones, CNI y otros organismos, para informar al General Morel. Agregó que en su repartición no existía ningún Coronel Cruz y que debe haber sido él mismo quien atendió a las mencionadas señoras. Finalizó diciendo que en el 6° piso del Ministerio de Defensa trabajaba un Cabo de apellido Rivas, pero que no se llamaba Nelson y que no recordaba su nombre preciso, el que debiera estar registrado en la Comandancia en Jefe.
            El 25 de julio de 1985, tuvo lugar un careo entre Viviana Díaz Caro y Marcelo Moren Brito. Ella reconoció al agente como el "Coronel Cruz" y reiteró sus declaraciones. Por su parte, Marcelo Moren Brito dijo que nunca se había hecho llamar "Coronel Cruz", que efectivamente había un Cabo de apellido Rivas y que recordaba haber atendido a la testigo en su oficina del 6° piso del Ministerio de Defensa Nacional. También este mismo día, Moren Brito fue careado con al señora Ana González González, quien reconoció en él al "Coronel Cruz", agregando que éste le había dicho que allí había un funcionario de nombre Nelson Rivas, cuestión que después le negó. Moren Brito reiteró los términos anteriores y señaló haber conversado con Ana González en el 6° piso del Ministerio de Defensa.
            A partir de las declaraciones de Moren Brito, el Tribunal inició diligencias tendientes a ubicar al Cabo Rivas. El 19 de diciembre de 1985, el Brigadier General Carlos Ojeda Vargas, Comandante General de la Guarnición de Ejército de Santiago, ofició diciendo que esa repartición no tenía antecedentes que algún Cabo de apellido Rivas hubiese prestado servicios entre los años 1973 y 1974. Se expidió entonces una orden judicial en la que señalaba que el Cabo Rivas trabajaba en el 6° piso del Ministerio de Defensa Nacional, Oficina Confidencial, y que en los años 73-74 estaba en la Comandancia General de la Guarnición de Ejército de Santiago. El 7 de marzo de 1986, Investigaciones informó que en el Ministerio de Defensa no se pudo realizar la diligencia encomendada por no contarse con mayores datos respecto a su nombre. También se hizo presente que en esa Secretaría de Estado les habían manifestado que todo tipo de consultas que requiriera el Tribunal debía hacerlas mediante Oficio.
            El 11 de marzo de 1986, el Tribunal decretó una serie de diligencias. Entre ellas, una nueva citación al Coronel (R) Marcelo Moren Brito; citar a Orlando José Manzo Durán, a raíz de que muchos detenidos fueron recluidos en el Campamento de Cuatro Alamos; solicitar informes por escrito sobre estos hechos a los Generales Rolando Garay y Enrique Morel; y oficiar a la Comandancia en Jefe del Ejército para que informara si era habitual que los funcionarios que se desempeñaban en la Oficina Confidencial del 6° piso del Ministerio de Defensa, usaran nombres distintos a los propios, atendido el carácter de sus funciones.
            El 8 de mayo de 1986 compareció Orlando José Manzo Durán quien declaró que entre 1974 y 1977 estuvo en comisión de servicio en la DINA, desempeñándose como Comandante del Campamento de Cuatro Alamos. En relación a los afectados, dijo no tener antecedentes que proporcionar e ignorar si estuvieron detenidos o no en Cuatro Alamos, aunque era factible que ello hubiera podido ser.
            El 17 de junio de 1986, por Oficio, declaró el Mayor de Ejército Enrique Morel Donoso. Dijo que en 1976 se desempeñaba como Comandante de la II División de Ejército con asiento en Santiago, y que nada tenía que ver con problemas de detenidos o de desaparecidos. Agregó que en 1976 Marcelo Moren Brito no se encontraba en Chile, sino que cumplía comisión de servicio en Brasil. También aclaró que no tenía "el recuerdo ni la sensación de que el señor General Garay como Intendente de Santiago, me haya formulado peticiones de informes sobre presuntos desaparecidos". Más aún, agregó estar seguro de no haber tenido conocimiento que se hubiese practicado alguna investigación ordenada por él.
            El 25 de junio de 1986, se consignaron las declaraciones que por Oficio prestó el Mayor General Rolando Garay Cifuentes. Dijo que durante 1976 se desempeñaba como Comandante de la Guarnición de Ejército de Santiago y Jefe de la Zona en Estado de Emergencia de la Región Metropolitana. Manifestó que en calidad de tal recibía todo tipo de cartas cuyos contenidos no recuerda. En cuanto a Marcelo Moren Brito expresó ubicarlo por su nombre, pero que no lo conocía personalmente. Expresó también que su labor de Intendente de Santiago la desempeñó desde 1977 y hasta 1980.
            El 8 de julio de 1986, compareció, por segunda vez, Marcelo Moren Brito. En esta oportunidad dijo no recordar las características físicas del Cabo de Ejército de apellido Rivas y reiteró que el General Enrique Morel Donoso ordenaba hacer averiguaciones sobre "presuntos desaparecidos". Casi simultáneamente, el 15 de julio de 1986, el Coronel Sergio Moreno Saravia, Subsecretario de Guerra, informaba al Tribunal que en el 6° piso del Ministerio de Defensa Nacional no existía ningún Departamento Confidencial y que su personal no usaba nombres distintos a los verdaderos. En lo referente a Marcelo Moren, se decía que éste se había desempeñado en las dependencias del 6° piso entre fines de 1978 y enero de 1981 y que no existía antecedente alguno respecto a "que le haya correspondido indagar, participar o dirigir las averiguaciones por el desaparecimiento de las personas mencionadas" (Familia Recabarren).
            El 4 de noviembre de 1986 se cerró el sumario y sobreseyó temporalmente la causa por octava vez. En su dictamen el Fiscal señaló "se consulta una vez más a este Ministerio, el dilema de aceptar pasivamente que el Juez se estrelle contra el Muro del Silencio o pedir a SS.Iltmas. que le haga insistir que los obstáculos son para vencerlos; esto requiere un exceso de afán investigatorio que en épocas de normalidad jurídica, cuando el Juez era Juez, sus órdenes, acatadas y respetadas, era una característica sobresaliente". Se finalizaba diciendo "sea cual sea el resultado, el destino de este proceso es posible que no pueda tener su elemento esencial, el reo, pero podríamos, por lo menos, dar una indubitada sensación de que se ha hecho lo imposible para proporcionar la tranquilidad de saber el destino de las personas desaparecidas". Firmaba el dictamen el Fiscal Tomás Dahm Guíñez. El 5 de diciembre de 1986, la Corte de Apelaciones de San Miguel revocó la resolución consultada y ordenó la reapertura del sumario.
            Posteriormente, en marzo de 1987, ante un nuevo sobreseimiento temporal el Fiscal Dahm expresó "al examinar los antecedentes que se agregan a este proceso, para este Ministerio es la sensación de una noche triste, larga, oscura, infecunda, en búsqueda de la verdad". Por último, agregaba "a pesar de los 10 años de tramitación sin resultados positivos, de las trescientas noventa y tres fojas, este Ministerio es de opinión que los efectos de sobreseimiento temporal se suspendan, revocándose la resolución consultada", (6 de marzo de 1987). El 28 de agosto de 1988, la Corte de Apelaciones de San Miguel revocó la resolución del Juez y ordenó, entre otras cosas, una nueva comparecencia al Tribunal de Marcelo Moren Brito.
            En esta etapa del proceso, el 6 de octubre de 1988, el Brigadier Humberto Leiva Gutiérrez, Vicedirector Nacional de la C.N.I., informó que ninguno de los afectados registraba actividades políticas u órdenes de aprehensión pendientes. El 16 de diciembre del mismo año el Mayor General Enrique Morel Donoso hizo una segunda declaración, por Oficio, en la que reiteró tener la seguridad que el General Garay no le solicitó ninguna investigación relativa a personas desaparecidas. También el Mayor General Rolando Garay Cifuentes, en diciembre de 1988, declaró una vez más por Oficio, señalando que entre los años 1977 y 1980 se desempeñó como Intendente de Santiago y que, en su calidad de tal, no estaba relacionado con situaciones de detenidos. Cuando se encontraba pendiente la citación a Marcelo Moren Brito -sin que hubiese sido posible para el Tribunal su ubicación- el 9 de agosto de 1989, el II Juzgado Militar de Santiago solicitó la inhibitoria del 2° Juzgado del Crimen de San Miguel para seguir conociendo del proceso. De esta manera, la Justicia Ordinaria se declaró incompetente, y los antecedentes fueron remitidos a la Justicia Militar, la que los radicó en la 2a. Fiscalía, siendo acumulados a la causa rol N°553-78 (16 de octubre de 1989), la que se había originado en una querella que familiares de 70 detenidos-desaparecidos presentaron en contra del General Manuel Contreras Sepúlveda, del Coronel Marcelo Moren Brito y del Teniente Coronel Rolf Gonzalo Wenderoth Pozo.
            Sin que se realizara ninguna diligencia en relación al desaparecimiento de Nalvia Rosa Mena, de los dos hermanos Recabarren González y del padre de éstos, Manuel Recabarren Rojas, y ninguna diligencia durante cuatro años, el 20 de noviembre de 1989, el Teniente Coronel de Ejército Enrique Ibarra Chamorro, Fiscal General Militar, solicitó para esta causa la aplicación del Decreto Ley de Amnistía (D.L. 2.191), porque el proceso había tenido como finalidad exclusiva la investigación de presuntos delitos ocurridos durante el período comprendido entre el 11 de septiembre de 1973 y el 10 de marzo de 1978 y porque, durante los 10 años de tramitación, no se había logrado "determinar responsabilidad de persona alguna". El 30 de noviembre de 1989, la solicitud fue acogida por el 2do. Juzgado Militar, el que sobreseyó total y definitivamente la causa -la que aún se encontraba en etapa de sumario- por "encontrarse extinguida la responsabilidad penal de las personas presuntamente inculpadas en los hechos denunciados". Las partes querellantes apelaron de dicha resolución a la Corte Marcial, la que confirmó el fallo en enero de 1992. Se interpuso entonces un Recurso de Queja ante la Corte Suprema de Justicia, la que al mes de diciembre de 1992, aún no evacuaba su resolución.

  (Antecedentes completos de la Querella en contra de Manuel Contreras Sepúlveda se encuentran en la ficha de Eduardo Alarcón Jara, 30 de julio de 1974).